La plaza de España, una de las plazas más importantes de Oviedo, no puede faltar en el itinerario de cualquier visitante que se precie. Descubre la historia y la belleza del parque cercano y de otros relajantes espacios mientras te das un descanso en este lugar lleno de encanto.
Cuando viajes a Oviedo, no dudes en sentarte en alguno de los bancos cercanos a la fuente que se alza en mitad de la plaza para contemplar el trajín de los edificios gubernamentales, además del flujo de turistas y residentes que hacen su vida cotidiana. Durante los días soleados, podrás refugiarte a la sombra de las imponentes torres rodeadas de arbustos y césped. También podrás contemplar los distintos estilos de arquitectura repartidos por la plaza.
En la actualidad, los edificios de la zona albergan delegaciones del gobierno e incluso algunas consejerías, sin embargo, no siempre ha sido así. Dirige la mirada hacia la calle de San Francisco para ver el lugar donde solían encontrarse un antiguo hospital y un psiquiátrico. El edificio se demolió en su totalidad tras el asedio a Oviedo en 1936 y, después, se construyó la zona que puedes ver hoy en día.
La intención original era diseñar la plaza de España siguiendo el ejemplo de las plazas imperiales del país, pero al concluir su construcción en 1970, su diseño resultó menos ornamentado de lo pretendido. Contempla sus edificios grises y su recio diseño. Se trata de características propias de la arquitectura española durante los años setenta, alejadas del estilo propio del periodo de posguerra.
A los amantes de la historia les fascinan algunas de las obras de arte públicas que se exponen en la plaza. Sube las escaleras hasta su entrada desde el campo de San Francisco para contemplar una estatua de Francisco Franco, una de las últimas estatuas dedicadas al dictador que quedan y que ha sido objeto de pintadas y todo tipo de actos vandálicos a lo largo de los años.
Te recomendamos explorar la plaza a pie, que es la única manera de recorrer sus diversas avenidas y empaparte de verdad de su historia y cultura. Si prefieres conducir, encontrarás aparcamiento de pago en los alrededores. Aunque no tardarás mucho tiempo en examinar la plaza, muy cerca también se encuentra el campo de San Francisco, por lo que podrás visitar los dos sitios en el mismo día.
