Qué, cuándo y cómo visitar el Parque Nacional de Doñana

“Doñana, un espacio protegido de más de 120.000 hectáreas divididas entre el parque nacional y el parque natural. Repartidos entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, estos terrenos constituyen el humedal más importante de Europa.

Su riqueza y valor ecológico han servido para que el Parque Nacional de Doñana sea considerado como Patrimonio de la Humanidad y Reserva de la Biosfera. Acompáñanos en un viaje a los rincones esenciales de la mayor reserva de la biodiversidad europea y a un entorno cambiante y fabuloso al que no le faltan tintes mitológicos.

La Atlántida de Platón
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Doñana ha sido tierra de civilizaciones. El historiador griego Estrabón, nacido en el año 64 a. de C., o el poeta latino del siglo IV d.C. Avieno, situaron aquí la mítica Tartessos. No fueron los tartesios los únicos que pisaron esta zona del suroeste de Andalucía. Etruscos, fenicios, griegos y romanos también realizaron sus correrías por unos lares que resultaban muy atractivos para el comercio.

También los romanos sacaron provecho de esta parte de Hispania y Doñana da fe de ello, puesto que aún se conservan algunos restos arqueológicos de la época.

No obstante, la historia más apasionante que hace referencia a la desembocadura del río Guadalquivir puede que sea la relatada por Platón. El maestro de Aristóteles ubicó aquí la mitológica Atlántida. De hecho, aventureros de todo el mundo han querido encontrar los vestigios de la antigua ciudad de los atlantes.

Tal vez el proyecto más conocido sea el que llevó a cabo el cineasta James Cameron, con ayuda y financiación de National Geographic. Expediciones como esta se han repetido en más de una ocasión. El resultado, obtenido a través de satélites, muestran los restos sumergidos de lo que parece una ciudad compuesta por anillos concéntricos.

Quizá la imaginación nos lleve muy lejos y lo de Platón no fuera más que una historia. En ese caso, Zeus nunca hubiese pisoteado la fastuosa ciudad situada cerca de las Columnas de Hércules (el Peñón de Gibraltar) y sus habitantes no habrían padecido la cólera del dios por volverse tan soberbios y corruptos.

Por qué se llama Doñana
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Desde tiempos de Alfonso X El Sabio, que pasó mucho tiempo en su castillo de El Puerto de Santa María, en Cádiz, los terrenos del actual parque formaban un auténtico bosque. Era el lugar idóneo para que los reyes disfrutaran del lugar como coto de caza.

No obstante, el rey fue repartiendo trocitos de la foresta a distintos nobles como fórmula para pagar sus servicios a la corona. En una de estas, la prebenda cayó en manos del duque de Medina Sidonia, el que comandara la Armada Invencible.

El buen señor estaba casado con la hija de la princesa de Éboli pero ella, mucho más pacata que su madre, se avergonzaba de la vida licenciosa de su progenitora. Así que pidió a su esposo retirarse y perderse en ese bosque apartado.

Allí se construyó un palacete para la susodicha, Doña Ana Gómez de Mendoza de Silva. A partir de ahí se empezó a conocer la zona como el coto de Doña Ana y, por deformación popular, acabó con la denominación actual.

Experiencias esenciales en el Parque Nacional de Doñana
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Después de estas pinceladas de mitología e historia, espero que se haya acrecentado vuestro interés por conocer este espacio natural tan espectacular. Verlo todo en un solo día resulta imposible, pero sí es el sitio adecuado para tener en mente si deseas hacer una escapada. ¿Qué tal si os propongo algunos tours imperdibles?

### Doñana desde Sanlúcar de Barrameda

El Parque Nacional de Doñana y su parque natural, ofrecen muchas opciones al visitante. De hecho, se puede elegir realizar la visita desde distintos accesos. Uno de los más habituales para alcanzar este imponente crisol de paisajes tiene su entrada en la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda.

Comenzamos aquí, aunque intentaremos no perdernos nada de este heterogéneo ecosistema. Preparaos para disfrutar dunas movibles, playas espectaculares, kilómetros de bosque y matorral y unas marismas en las que la vida bulle a borbotones.

#### Visita al parque en 4×4

Desde Sanlúcar se puede realizar una visita programada en microbuses con forma de 4×4. Antes de ello hay que cruzar el brazo de agua que separa la localidad de Doñana. Una barcaza os podrá acercar desde la playa de Bajo de Guía.

Nada más pisar la orilla os toparéis con las primeras especies animales que deambulan por la playa. En su mayoría son aves que picotean la arena bañada por la olas en busca de pequeños crustáceos y nematodos. No podemos olvidar que Doñana, solo en invierno, sirve de refugio a más de 200 mil aves que buscan un clima más suave para anidar.

Es hora de subir a los todoterrenos y empezar un periplo de unos 30 kilómetros por diferentes ecosistemas: la playa, las dunas móviles de un blanco cegador, los bosques de pino, la vera, un espacio fronterizo entre el arbolado y la marisma… En estas tierras habitan algunas especies en peligro de extinción, como el lince ibérico, la tortuga moro y el águila imperial ibérica.

El recorrido en 4×4 finaliza en La Plancha. Ante vuestros ojos tendréis un auténtico poblado de chozas de madera y ramajes de pinares. Son las antiguas casas de los marismeños del siglo XIX.

De regreso, subiréis a bordo del Buque Real San Fernando. Os llevará por el Guadalquivir, auténtico protagonista de Doñana. La travesía dura media hora y un guía os explicará todo sobre el río, la vida en sus riberas, sus orígenes y la cantidad de animales que dependen de su buena conservación.

#### El Centro de Visitantes de la Fábrica de Hielo.

Este antiguo edificio de Sanlúcar de Barrameda había sido en otros tiempos una fábrica de hielo. Ahora conserva el nombre, ha sido rehabilitado y sus dos plantas proponen varios espacios de interés.

Uno está dedicado al ecosistema del Parque Nacional de Doñana. Otro plantea la evolución humana en este contexto geográfico. Por último se atraviesa un espacio dedicado al papel que desempeñó esta ciudad en el descubrimiento de América. ¿Lo más impactante?, la réplica de la nao con la que Juan Sebastián ElCano dio la vuelta al mundo.

### Visita a la Virgen del Rocío

Uno de los puntos más visitados del Parque Nacional de Doñana es la aldea del Rocío. Calles sin asfaltar que se rinden ante la Virgen del Rocío, cuya multitudinaria romería es mundialmente conocida.

Sin embargo, los orígenes de esta devoción por la Blanca Paloma resultan ser paganos. Dice la leyenda que Hércules buscaba a su amada, la diosa Astarté. El destino hizo que el semidios escogiera el camino contrario. De esta manera, Hércules acabaría fundando Sevilla y su amada diosa, ubicada en la otra ribera del Guadalquivir, fundó Triana.

Curiosamente, los antiguos veneradores de Astarté la identificaban con una paloma blanca. Para dar más veracidad a los orígenes de la virgen que habita la famosa ermita, hay que concretar que es conocida por sus fieles como la Blanca Paloma.

Es un buen momento para visitar la aldea y tomar algunas fotos de indudable valor. Además, os proponemos una entrada a la ermita con la imagen de la virgen más venerada del mundo. A su romería acuden cada año más de un millón de personas y buena parte del recorrido se realiza a través del coto de Doñana.

### El Palacio del Rey

Solo podrás visitar esta zona, una de las más exclusivas de Doñana, si contratas la visita con la única agencia autorizada oficialmente para realizar el recorrido. Vale la pena. Esta parte del parque es de gran valor para los amantes de la ornitología y desde la agencia Doñana Nature, también facilitan la observación del lince ibérico.

El Palacio del Rey es una edificación cargada de historia. Sirve como colofón a una jornada de estrecho contacto con la naturaleza. Después de disfrutar de esta ebullición de fauna y flora, la visita al edificio no te dejará indiferente.

Además, la agencia autorizada enriquece la experiencia con una cata de productos gastronómicos. Se prueban platos de los fogones locales más tradicionales. Será una experiencia única que no podrás olvidar.

### Visita desde El Acebuche

Esta entrada está situada en Huelva. Existen múltiples zonas de senderismo, pero no se puede acceder al parque si no lo haces a través de un coche con autorización oficial. Esta es la razón por la que deberás contratar una visita guiada con una agencia autorizada.

Aquí también se usan los todoterrenos. La salida se hace desde el Centro de Recepción del Acebuche y se accede a Doñana a través de la playa de Matalascañas. Si acudes temprano, por la mañana, encontrarás a los mariscadores recogiendo coquinas. Resulta una experiencia muy curiosa, sobre todo cuando te explican la dureza de este trabajo.

Poco tiempo después notarás que ya andas por otros caminos. Las dunas hacen su entrada en escena y el vehículo puede dar botes durante un buen trecho. No en vano, estas dunas móviles pueden llegar a alcanzar hasta los 30 metros de altura.

Por aquí, con un poco de suerte, puede que veas alguna tortuga y ánsares. Es su hábitat predilecto. No puedes olvidar la cámara de fotos, cualquier rincón es de postal y te permitirá tomar estupendas instantáneas.

Después de las dunas les toca el turno a las marismas. El cambio de paisaje es notorio. La tierra es básicamente arcilla y, con las lluvias, se forman estas peculiares zonas inundadas. En estas lagunas podrás ver cómo pastan tranquilamente las vacas y los caballos marismeños.

Por cierto, ¿sabías que este tipo de caballos es el que Colón decidió llevar en su segunda expedición al nuevo mundo? La razón es que eran más resistentes y los primeros que llevaron a América no pudieron resistir el viaje.

En la zona de los pinares deberás permanecer muy atento. En esta parte de bosque mediterráneo podrás avistar jabalíes, gamos y ciervos. No suelen espantarse con las visitas y siguen comiendo, a lo suyo. Es el momento perfecto para poder fotografiarlos.

### La saca de yeguas

Si visitas la zona alrededor del 26 de junio, coincidiendo con la Feria de San Pedro, en honor al patrón de Almonte, podrás disfrutar de un espectáculo único. Se trata de la saca de yeguas almonteñas.

Este evento se celebra desde hace más de quinientos años y tiene como protagonista a los yegüerizos. Estos especialistas van recogiendo las yeguas y sus potrillos de varias zonas de las marismas.

Los encargados de conducir al ganado pasan primero por Almonte, para recibir la bendición del sacerdote de la ermita del Rocío. Luego van conduciendo a la caballería por las calles del pueblo, hasta llegar a una zona en la que se celebrará el evento ganadero.

Durante cinco días los animales permanecerán allí. Luego se procederá al corte de las crines y a colocar herraduras a las potras. Después de esto ya están preparadas para la venta. Después del acontecimiento, que congrega a gran cantidad de público, las yeguas son devueltas a su lugar de origen hasta el próximo año.

Como ves son muchas las cosas que puedes descubrir en el Parque Nacional de Doñana y este espacio natural puede dar para muchas visitas. ¿Qué otros lugares propondrías tú?

Si quieres visitar el parque de Doñana y no tienes coche, Expedia te facilita la vida, alquila un coche y recorre la zona con libertad.”