No se de dónde viene la valoración de 5 estrellas - no tiene nada que ver con ese nivel de hotel. Lo positivo: ubicación perfecta, al lado del barrio antiguo de A Coruña y el centro con muchos restaurantes buenos a 5-10 minutos a pie; las vistas del puerto desde la habitación y sala de desayuno; la insonorización y limpieza de la habitación. Por lo demás, el hotel es soso y no tiene ningún carácter. Por el Covid, no había ni bar, ni cafetería ni restaurante abierto. El servicio de la recepción es correcto pero frío, y no hay conserje ni portero ni otros servicios que uno espera de un hotel de 5 estrellas. En la habitación falta una plancha, no hay ningún enchufe para cargar su móvil a menos que te bajas para desenchufar una lampara bajo la mesa - parece un hotel en el que no han hecho ningúna reforma desde los años 80. El baño es amplio y tiene jacuzzi pero los productos de aseo son básicos, ni siquiera hay loción de cuerpo. Hay maquina Nespresso pero con tasas de cartón envueltos en plástico - la imagen es pobre. Por fin, el gimnasio no forma parte del hotel, y no hay acceso directo desde el hotel. Es un complejo deportivo de la cadena Metropolitan, y aunque hasta en los ascensores dicen que hay acceso en el nivel -1, es todo una mentira, hay que salir del hotel, caminar 300 metros hasta la entrada y entonces tienes aceso y la verdad es que está muy bien pero que lo cuenten así.No hay sitio para aparcar. El desayuno, por el Covid, es buffet "asistido", y desagradable.