Vuelos baratos a Turín

En Turín solo encontrarás un aeropuerto, que es Turín (TRN-A. Internacional de Turín).

Este aeropuerto está a 15 km; asegúrate de comprobar todas las opciones a tu disposición.

La respuesta es sencilla: Turín (TRN-A. Internacional de Turín) (a 15 km), el único aeropuerto de la ciudad.

En total, 14, que ofrecen rutas desde 55 aeropuertos.

La principal aerolínea es Air France, y el vuelo de Altos del Sena es uno de los más populares.

Tienes 387 vuelos directos a la semana.

Muchos viajeros acuden a Turín desde Roma, París y Catania.

Si sales de Roma, tendrás que pasar en el avión aproximadamente 1 h y 14 min; desde París, 1 h y 24 min, y desde Catania, 2 h y 2 min.

Para ahorrar en el vuelo, lo más básico suele ser no dejar la reserva para última hora. Otra estrategia es consultar todas las opciones a tu alcance: quizás encuentres mejores precios en una terminal más pequeña. Lo que está claro es que cuando veas una tarifa tentadora, no la puedes dejar escapar: ¡suelen volar!

Si no quieres que el trayecto se te haga demasiado pesado, te traemos un buen remedio: unos cuantos consejos básicos para que tus vacaciones arranquen de la mejor manera.Haz una lista de todo lo que vayas a necesitar durante el trayecto e inclúyelo en el equipaje de mano. Son indispensables el cepillo de dientes, un libro electrónico o una tableta con muchas películas, el cargador, medicinas y algo de dinero por si quieres comprar algo a bordo.Por otro lado, revisa todos los bolsillos de tu equipaje de mano, también los ocultos para cerciorarte de que no llevas objetos prohibidos. La lista puede diferir entre aerolíneas, pero siempre contiene navajas, otros objetos cortantes, productos inflamables o líquidos de más de 100 ml.Y, finalmente, por más que nos guste salir elegantes en las fotos, para viajar en avión, la comodidad es lo primero, sobre todo si el trayecto es largo. Decídete por prendas transpirables y alguna chaqueta por si tienes frío, y lleva zapatos cómodos para que no se te hinchen los pies. Además, destierra prendas muy ceñidas o, si tienes problemas circulatorios, utiliza medias de compresión para evitar las molestias propias del síndrome de la clase turista.

Si te fijas en los aspectos siguientes, el control de seguridad será un mero trámite: La tarjeta de embarque y el pasaporte deberían estar a mano, ya que los tendrás que ir enseñando. No cruces el arco de seguridad con objetos metálicos o con el cinturón, ya que deberás volver atrás y perderás tiempo antes de embarcar. Ten en mente que los ordenadores, las tabletas y dispositivos del estilo deben ser fáciles de sacar de entre tus pertenencias, ya que los tendrás que colocar aparte al pasar el control. Los líquidos del equipaje de mano tienen que ir en una bolsa transparente y no superar 1 l en total; ya sabes que los envases deben ser de 100 ml como máximo. Las botas, las plataformas o los tacones te comen espacio en la maleta, aunque si te pones este tipo de calzado el día del control, tendrás que quitártelo; tenlo en cuenta. Y, ante todo, comprueba que no se te haya colado ningún objeto punzante, como navajas, tijeras, etc., en la bolsa de mano; puedes meterlo en la maleta que factures.