Pasea tranquilamente por el parque del Mar y haz una pausa para apreciar las impresionantes vistas de la catedral y los trabajos del legendario artista catalán Joan Miró. Pasea por la antigua muralla y relájate tomando una bebida fresca en uno de los cafés al aire libre del parque.
Durante siglos, las suaves olas del mar Mediterráneo lamieron las murallas de la ciudad, pero las contuvo la construcción de una carretera junto al mar. El parque del Mar se abrió en 1984 para devolver la belleza natural a la zona y desde entonces es uno de los lugares favoritos de los lugareños.
Uno de los senderos más populares del parque pasa sobre lo alto de las murallas del casco antiguo. Pasea por este ancho camino para disfrutar de preciosas vistas de la impresionante catedral de Mallorca y del reluciente mar Mediterráneo. Llega a primera hora de la mañana para ver cómo sale el sol sobre la catedral y la baña de un precioso color dorado. Puedes tomar el primer café del día en una de las numerosas cafeterías que rodean el parque y ver cómo los lugareños se ejercitan por la mañana o van al trabajo.
En el centro del parque encontrarás un gran lago con una alta fuente en medio. Relájate un rato junto al lago o sigue caminando por el parque para ver un colorido mural de cerámica que Joan Miró donó a la ciudad.
De ser posible, disfruta del cine al aire libre en el que se proyectan películas durante el verano sobre una gran pantalla que flota en el lago. También es posible que puedas asistir a un musical en el auditorio. Durante el día, párate a ver cómo los artistas callejeros entretienen a la gente.
El parque del Mar se encuentra junto al mar en el casco antiguo de la ciudad. Abre todo el día, así que también puedes dar un romántico paseo por él al caer la noche, cuando se encienden las luces de la catedral.