Descubre la alta sociedad de Pisa en el Palazzo Blu, o “palacio azul”, una construcción bellamente preservada. La colección permanente de esta galería de arte, museo y centro cultural muestra el trabajo de los pisanos desde el siglo XIV en adelante. El edificio en sí ya merece la pena, al igual que sus vistas del río Arno.
El Palazzo Blu muestra la riqueza artística pisana y es buena prueba de que la Torre Inclinada no es la única joya de esta ciudad. Su elegante fachada de color azul cielo, la entrada con arco de piedra y el tejado de diseño clásico lo hacen destacar entre los edificios más convencionales que lo rodean.
En 1950, la fundación del palacio comenzó a reunir la colección de arte permanente, que incluye muchas obras de pintores del siglo XVII, así como relevantes esculturas y adquisiciones más actuales. Muchas de ellas tienen relación con Pisa, ya sea a través de los artistas, los clientes o el tema.
El Palazzo Blu presenta un diseño del siglo XIV con suntuosos interiores del siglo XIX. En él podrás ver esculturas, pinturas, monedas, objetos, mobiliario antiguo y piezas de diseño modernas. La galería de arte organiza distintas exposiciones temporales a lo largo del año, a menudo de célebres artistas europeos e internacionales.
Durante el recorrido, prueba a imaginarte como un aristócrata italiano del pasado. No te será difícil, ya que esta fue, en su momento, la residencia de familias nobles de Pisa. Parte del edificio se ha conservado para mostrar cómo vivían, y han conseguido dejarla en un estado casi perfecto, con mobiliario clásico y detalles dorados. El recinto también cuenta con un auditorio para eventos culturales locales.
El desarrollo del Palazzo Blu forma parte de un programa más amplio del Gobierno local que tiene como objetivo preservar y enriquecer la vida cultural en Pisa y mantener un barrio de museos junto a la orilla del río. Lo encontrarás cerca del Palazzo Gambacorti y del Ponte di Mezzo. El Palazzo Blu abre a diario, la entrada es gratuita y cuenta con una cafetería.