La ubicación es buena, nos pudimos mover a pie a muchas partes y el hotel en sí es lindísimo, con muchos detalles originales, siempre lleno de vida, el proceso de check in y check out fue estupendo, la habitación es cómoda, aunque pequeña pero no esperábamos más por ser Londres, a mi esposo le encantó la cama, a mí me pareció un poco dura, tiene persianas eléctricas porque el ancho de la habitación es del ancho de la cama y tendrías que subirte a la cama para bajar o subir las persianas