El Gran Teatro es la sede de la Ópera de Polonia, el Ballet Nacional y el Teatro Nacional. Aprovecha tus viajes a Varsovia para asistir a los interesantes eventos que se celebran aquí, desde espectáculos hasta conferencias. Admira la soberbia arquitectura clásica del edificio y profundiza en la historia del teatro polaco en el museo que alberga en su interior.
La fachada clásica del teatro data de mediados del sigloXIX. Fíjate en las dos estatuas que representan a los fundadores del Teatro Nacional y de la Ópera Nacional, Wojciech Boguslawski y Stanislaw Moniuszko, respectivamente.
El edificio está coronado por una estatua de Apolo añadida en2002, aunque en realidad formaba parte del diseño inicial del arquitecto italiano Antonio Corazzi. Finalmente, no pudo incluirla durante la construcción del edificio porque el zar NicolásI no quería que la belleza del teatro eclipsara los edificios de Rusia.
La fachada es una de las escasas partes del teatro original que resistieron los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. El resto del edificio tuvo que reconstruirse tras la guerra. En una placa que aparece a la derecha de la entrada principal de teatro se rinde homenaje a las numerosas víctimas del fascismo.
El edificio contiene un magnífico auditorio que puede albergar a 1800espectadores y un teatro más pequeño, con capacidad para 248personas. Aquí se celebran espectáculos de ópera y ballet generalmente de compositores polacos, aunque también se interpretan obras clásicas de Beethoven, Mozart, Chaikovski, Verdi y Wagner, entre otros. En el ala oeste del edificio se encuentra el Teatro Nacional, una institución independiente donde se representan obras clásicas de la literatura polaca e internacional.
No te pierdas el Museo del Teatro, dedicado a la historia del teatro polaco y su influencia en la cultura nacional. Podrás examinar de cerca carteles, programas, vestuario, diseños de escenario y objetos de interés relacionados con intérpretes famosos.
La temporada teatral abarca desde septiembre hasta junio y hay funciones todos los días de la semana. Para visitar el Gran Teatro, puedes tomar un autobús o el tranvía. Vale la pena acudir de noche para verlo iluminado con reflectores, ya que su decoración resulta todavía más bella.