Los viajes a Burdeos suelen contemplar una visita al jardín público ubicado en pleno centro de la ciudad, un parque muy popular por sus plantas exóticas y sus instalaciones de agua, entre muchos otros motivos. Además de zonas verdes y senderos con sombra, este parque cuenta con un museo, una biblioteca, un teatro infantil y un restaurante con mesas al aire libre. Únete a los habitantes de la región que acuden a este bello parque para hacer ejercicio, pasear y relajarse.
Los jardines se diseñaron en1746 con un estilo similar al de André le Notre, creador de los jardines del Palacio de Versalles. Actualmente, el parque tiene dos objetivos: conservar la biodiversidad y proteger las plantas en peligro de extinción, y proporcionar una zona agradable que el público general pueda disfrutar.
Observa la gran variedad de flores y árboles de los jardines botánicos, que contienen unas 3.000especies de plantas dispuestas alrededor de lagos y estanques, en cuyas aguas nadan patos y cisnes. Haz un pícnic en una de las zonas verdes descubiertas o elige un banco para disfrutar la sombra de los coloridos árboles. Y, para descansar, busca tu sitio junto al río serpenteante que recorre la orilla norte del parque.
Lleva a los niños a ver una de las representaciones de marionetas históricas del espectáculo Guignol Guérin. En este teatro de marionetas, que existe desde1853, se cuentan historias basadas en el personaje de Guiñol, un trabajador de la seda que suele involucrarse en situaciones cómicas.
Alrededor del parque hay otras atracciones culturales que puedes visitar, como el Museo de Historia Natural, donde encontrarás figuras de diferentes animales y exposiciones informativas. La biblioteca del jardín público está instalada en una de las antiguas casas de ciudad, en el perímetro del jardín.
A continuación, saborea una buena comida en el restaurante del parque. La zona de mesas al aire libre es muy popular durante los meses más cálidos de verano, cuando los comensales pueden beber una copa de vino mientras observan el atardecer.
Las entradas al parque están cerca de la parada del tranvía Jardin Public y las paradas de autobús Longchamps y Rue d'Aviau. Los jardines abren durante todo el año y la entrada es gratuita. Si los visitas en otoño, el espectacular follaje de los árboles te dejará boquiabierto.