Hallbergmoos está situada en el distrito de Freising, en Baviera, y cuenta con una población de cerca de 10.000 habitantes. Si te alojas en Múnich, solo tienes que tomar la línea S8 desde la estación principal, Munich Hauptbahnhof, y estarás en Hallbergmoos en solo media hora. Este distrito declaró su independencia en 1831. El municipio se amplió en 1945 con la integración de las nuevas urbanizaciones de Goldbach, y siguió creciendo poco después con la construcción de un aeropuerto. Birkeneck es un bonito barrio al noreste de Hallbergmoos con un castillo de interés cultural y una alta concentración de los jóvenes más necesitados hoy en día. Otros barrios de la ciudad son Erching, Brandstadl, Zwillingshof, Mariabrunn y Fischerhof.
La historia de la Alta Baviera hunde sus raíces en los tiempos del príncipe-obispo de Freising. El castillo de este príncipe es una de las visitas obligadas en cualquier escapada a Hallbergmoos. Comprobarás que aún se conserva en muy buen estado. El barrio más antiguo es Erching, al noroeste. Si eliges uno de los paquetes de vacaciones en Hallbergmoos, aprovecha para pasear por el frondoso paisaje que rodea el Castillo de Erching, que se construyó por orden del obispo de Freising en el siglo XVII. La estructura, de estilo barroco, tiene tres pisos y un foso. Junto al castillo encontrarás la capilla de San Otilio, con un atractivo chapitel poligonal.
Si te gusta la arquitectura, visita también la iglesia parroquial católica de Santa Teresa, situada en Theresienstraße. El arquitecto, Joseph D. Ohlmüller, construyó este templo en el siglo XIX. El estilo italiano de la estructura queda manifiesto, sobre todo, en los muros de ladrillo de la nave, de estilo clásico, y en el estilo de la sacristía. A pocos pasos de allí, en la misma Theresienstraße, verás un monumento bélico dedicado a las víctimas de la guerra Francogermana de 1870 y de ambas guerras mundiales. Este gigantesco monumento presenta dos leones de bronce y un obelisco de granito.
Aprovecha la escapada a Hallbergmoos para saborear los platos y bebidas típicamente bávaros. En Alter Wirt Guesthouse, en Goldach, puedes probar especialidades como los ravioli suevos, los rollos de carne o las empanadillas. Si aún te quedan fuerzas para una última visita, acércate a la granja Hausler, donde podrás descubrir detalles sobre la agricultura orgánica y probar delicias caseras con productos de la propia granja. Theresienstraße se encuentra en el corazón de Hallbergmoos, y ofrece innumerables restaurantes y bares, como la bodega Il Buco di Bacco.