La Torre del Reloj refleja las luces de cada amanecer y cada puesta de sol del casco antiguo de la ciudad. Con sus 30metros de altura, esta torre con un paso arqueado ha sido durante mucho tiempo un emblema de la ciudad y atrae a los visitantes tanto por su diseño como por su pasado histórico.
Puedes llegar a la torre desde la plaza de España, en el norte, a través de la sinuosa calle Huerta Chica que conduce a la bella calle Arquillo del Reloj, cuyo nombre hace referencia a la famosa torre. Al acercarte a tu objetivo entenderás que el sobrenombre de arquillo del reloj es perfectamente descriptivo, pues en la base de esta esbelta estructura, flanqueada por casas a ambos lados, se abre un paso coronado con un arco de medio punto que da acceso a la Plaza Mayor. Desde luego, no hay forma más majestuosa de acceder a esta plaza en tus viajes a Chiclana de la Frontera.
La Torre del Reloj es una obra del sigloXVIII, y se encuentra en el lugar que ocupó una de las entradas originales de la antigua zona amurallada de la ciudad medieval. Al cruzar el arco te recibirán las vistas de la iglesia de san Juan Bautista, que originalmente se proyectó con dos campanarios que no llegaron a construirse. El arquillo del reloj asumió entonces la función de campanario de la iglesia.
Levanta la vista para contemplar la esfera del reloj que ha marcado el paso del tiempo en esta ciudad durante siglos. Estás ante una obra declarada patrimonio nacional en 1985 en reconocimiento a su importancia en la riqueza cultural de Chiclana de la Frontera.
Si te acercas a la torre para examinar sus materiales, verás que está construida con bloques de piedra ostionera, característica de la región, artísticamente tallada y con juntas bien definidas. Sobre el arco se alza el cuerpo principal de la torre, donde se encuentra el reloj, y un espacio octagonal decorado para las campanas. Una cúpula embaldosada con una simple cruz cubre toda la estructura.
La Torre del Reloj tiene una ubicación céntrica, en la calle Arquillo del Reloj, en uno de los extremos de la Plaza Mayor y junto a la iglesia de san Juan Bautista. Puedes combinar la salida con una visita al convento de Jesús Nazareno, a solo cincominutos a pie.
