El puente romano de Tréveris es una inmensa estructura con cimientos del sigloII levantada sobre unos pilares de piedra que fueron excavados en lo más profundo del lecho fluvial. Durante el sigloXVIII se añadieron los arcos y la carretera de ladrillos rojizos, cuando el puente constituía uno de los accesos a la ciudad. Anímate a cruzar el puente para disfrutar de unas maravillosas vistas del río, de la orilla repleta de vegetación y de las colinas frondosas a lo lejos. ¿Qué más puedes pedirles a los viajes a Tréveris?
Pasea junto a la tranquila ribera por el camino que discurre bajo uno de los arcos o da de comer a las aves que sacian su sed junto a una pequeña playa de guijarros. Ten en cuenta que el puente está abierto al tráfico de coches y bicicletas, aunque también dispone de aceras para los peatones.
Impresiona saber que un puente con más de 2000 años de antigüedad siga en uso. En la actualidad, cuenta con seis pilas de piedra para sostener los arcos, aunque tenía más en sus inicios. La calzada original era de madera y se cree probable que los antepechos de piedra eran los que sostenían la estructura de madera.
El general romano Agripa construyó el puente como parte de la ruta que iba de Lyon a Colonia. En el lugar aparecieron restos de madera, uno de los cuales fue datado en el año 17 a. C. Asimismo hay diversos indicios que sugieren que el puente se reconstruyó en varias ocasiones a lo largo de los siglos siguientes.
La piedra tiene un aspecto negruzco, ya que está compuesta básicamente por basalto de las montañas Eifel, una región volcánica. Los romanos hicieron gala de su ingenio conectando los grandes bloques de piedras mediante abrazaderas, el mismo sistema que se aplicó en la Porta Nigra, también en Tréveris. Así ha permanecido indemne hasta la actualidad. Casi dos mil años después, en 1945, el ejército norteamericano tomó el control de la zona y, a diferencia de otros puntos de la ciudad, no fue necesario bombardear el puente, pues su toma fue inmediata.
En alemán, este puente recibe el nombre de "Römerbrücke" y puedes visitarlo a cualquier hora del día y de la noche sin coste alguno.
Este puente romano salva el río Mosela al oeste del casco histórico de Tréveris, junto a las avenidas Kaiserstraße y Südallee, donde se encuentra el bastión Südallee. Aprovecha tu visita para descubrir el resto de los atractivos turísticos de la zona, como el Hochbunker von Trier, un búnker de la Segunda Guerra Mundial, las termas imperiales de Tréveris o la catedral.
