En tus viajes a Hanói no puede faltar una vista al magnífico Museo Nacional de Historia Vietnamita. No solo te sorprenderá su arquitectura clásica decorada con estatuas hindúes, sino las obras que se exponen en su interior, como herramientas y utensilios del año 10000antes de nuestra era.
Antes de acceder al museo, examina con atención el exquisito diseño del edificio. Se construyó en1932 e inicialmente era la sede de la Escuela Francesa de Extremo Oriente. La fachada de color naranja combina columnas francesas típicas con tejados curvos y torres hexagonales propios de los templos chinos. Tanto el interior como el exterior están decorados con estatuas de dioses de los reinos de Champa y jemer.
Comienza tu visita en la planta baja, donde encontrarás varias exposiciones de gran calidad sobre historia antigua. Aquí podrás contemplar las joyas que lucían los primeros aristócratas del país, así como las armas prehistóricas y las herramientas de metal que se empleaban para cazar y alimentarse a comienzos del período Neolítico. También vale la pena observar de cerca las tumbas con restos humanos auténticos y la fantástica colección de tambores de bronce fundido de la cultura Dong Son, la más amplia del país.
Sube al segundopiso del museo para adentrarte de lleno en el sigloXV. Aquí podrás examinar una serie de esculturas de bronce que representan escenas idílicas del Vietnam rural. En esta planta también destaca la colección de tacos xilográficos que se empleaban para imprimir libros de plegarias budistas. No te vayas sin admirar las elaboradas piezas de cerámica perfectamente conservadas de la dinastía Nguyen, que reinó del sigloXIX a mediados del sigloXX.
En el museo también podrás ver pancartas de la resistencia durante la guerra con los franceses. En las tiendas de la ciudad encontrarás ejemplos parecidos de carteles propagandísticos en los que se fomenta el antiamericanismo y se realizan llamamientos para colaborar con el sector público.
El Museo Nacional de Historia Vietnamita se localiza en la calle Trang Tien, en el este de Hanói. Cierra el primer lunes de cada mes y la entrada es de pago, pero muy asequible. Si te entra el apetito durante la visita, puedes tomar una bebida o un refrigerio en la cafetería que se halla en el patio.
