Disfruta de unas vacaciones en Lunenburg y visita esta localidad de South Shore, Nueva Escocia, un lugar cuyo origen se remonta a hace más de 250 años. Descubre la historia del sector pesquero, visita edificios históricos y embárcate en un crucero para avistar ballenas.
Lunenburg se fundó a mediados del siglo XVIII como asentamiento colonial británico. Durante el siglo XIX, esta comunidad costera se convirtió en uno de los principales núcleos pesqueros, y aún sigue creciendo en la actualidad.
Puedes conocer los detalles de este patrimonio en el Museo de la Pesca del Atlántico, que ofrece exposiciones y cuenta con embarcaciones atracadas en la dársena. Visita la goleta de pesca más antigua de Canadá y escucha a los pescadores y los capitanes jubilados contar historias de sus travesías. El museo también alberga uno de los acuarios más amplios de la costa este del país, con especies que incluyen anguilas, cangrejos y langostas gigantes.
Después, acércate al centro de la ciudad para seguir indagando en la historia de Lunenburg. En sus calles verás antiguos edificios de madera muy bien preservados, algunos del siglo XVIII. Puedes visitar la casa Knaut-Rhuland, que data de 1793. Esta antigua residencia de madera es ahora un museo dedicado a los orígenes de la ciudad, y muestra muebles de la época, objetos victorianos y estancias con chimenea del siglo XIX.
Aprovecha nuestros viajes baratos a Lunenburg para adentrarte en el mar y participar en una aventura a bordo de un crucero. Desde la cubierta, podrás disfrutar de los intensos colores de los edificios de la ciudad y de la belleza del faro en el extremo del malecón. Si encuentras paquetes de vacaciones en Lunenburg entre junio y octubre, podrás realizar excursiones de avistamiento de ballenas y disfrutar del privilegio de contemplar los calderones y las ballenas jorobadas que pasan por la zona en su ruta migratoria.
Lunenburg se encuentra a unas dos horas en coche al suroeste de Halifax, ciudad que cuenta con aeropuerto internacional. Busca ya las mejores ofertas de viajes a Lunenburg y reserva, como mínimo, dos días para disfrutar de su belleza paisajística, su historia y su mar.