Bajo la famosa terraza de Brühl se esconden los restos de la antigua fortaleza de Dresde, conocida como Festung Dresden. Explora los enormes corredores, contempla las impresionantes armas que solían utilizarse para proteger la ciudad y escucha historias sobre el pasado de la ciudad con una audioguía.
Deja que tus ojos se acostumbren a la penumbra del museo Festung de Dresde. Déjate sorprender por los muros originales y las enormes salas a medida que avanzas. Atraviesa el portal de ladrillos, con más de cuatro siglos de antigüedad, la última entrada a la residencia sajona que se mantiene en pie. En este museo podrás observar los antiguos fosos, cañones y baluartes.
La ubicación bajo tierra de la fortaleza la convierten en toda una experiencia sensorial. Cuando los ojos se hayan acostumbrado a la oscuridad, también lo harán el olfato y el tacto, y te transportarán a otra época. Festung Dresden es un destino único en una ciudad destruida durante la Segunda Guerra Mundial, pues la mayor parte de su estructura original continúa intacta.
Aunque las visitas guiadas solamente se ofrecen en alemán, puedes realizar tu propio recorrido gracias a las audioguías. Descubre la historia del fuerte y el papel que desempeñó en la protección de la ciudad en las 14 estancias del recorrido. Camina entre las exhibiciones en las que se explican las estrategias de defensa de la ciudad.
Al salir de la estructura defensiva te encontrarás en la hermosa terraza de Brühl, que cuenta con cafeterías junto al río, una hermosa vista de la ciudad y varias de las atracciones principales de la región. Visita la Academia de las Artes, el Albertinum y la Sinagoga Nueva, para después relajarte en el hermoso jardín de Brühl.
El museo abre todos los días y la entrada es de pago. Si vas a Festung Dresden en tranvía o en autobús, bájate en Schlossplatz. Los viajes a Dresde pueden incluir una visita a este museo, ya que se trata de una actividad familiar fascinante.