El edificio del Capitolio estatal de Texas alberga las cámaras legislativas estatales y el despacho del Gobernador de Texas. La estructura del capitolio se basa en la arquitectura renacentista italiana del siglo XV, con una cúpula de granito y numerosas columnas de granito de gran tamaño.
A primera vista, el Capitolio estatal de Texas se parece mucho al Capitolio de EE. UU. de Washington, D.C. En realidad, es 4,5 metros más alto que el de Washington y es el capitolio estatal más grande del país si se tiene en cuenta el tamaño de su superficie total. Para su construcción, se empleó principalmente a presos e inmigrantes a finales de la década de los 80 del siglo XIX estos trabajadores recibieron como pago tierras con una extensión aproximada de más de 1 millón de hectáreas. Desde entonces, este edificio ha sido la sede del poder político en Texas. Este capitolio es llamativo debido a su belleza y magnificencia. La ley estatal protege los lugares de la ciudad en los que se puede ver el capitolio desde un punto más elevado. Los edificios elevados no pueden bloquear la vista del capitolio.
Puedes visitar este edificio de manera gratuita para disfrutar de sus interiores y conocer parte de su fascinante pasado. Las visitas se realizan todos los días cada 45 minutos, con la entrada sur del capitolio como punto de partida. Coge un folleto informativo y un asistente de guía en la primera planta del edificio del capitolio. También puedes pasear por las 9 hectáreas que rodean el edificio y que están cuidadas de forma espectacular. Los jardines están salpicados de monumentos históricos.
El edificio del Capitolio estatal de Texas se encuentra en el centro de Austin, cuatro calles al sur de la Universidad de Texas. La entrada al edificio es gratuita. No hay servicio de restauración, así que tendrás que llevar comida u organizar un picnic en una zona tranquila de los jardines.