Habitación limpia y acogedora, espacio justo, pero bien aprovechado. Baño pequeño, pero MUY limpio. Espacios silenciosos, pese a que la habitación estaba cerca de los ascensores.
Desayuno espectacular, el último día hacíamos el checkout muy temprano y solicitamos el desayuno para llevar que fue muy copioso (para dos personas: 2 botellas de agua, 2 zumos de naranja, 2 manzanas grandes, 2 barritas de cereales y 4 sandwiches de queso y lechuga)