Pocos lugares de Bucarest tienen tanta importancia histórica y tantas opciones de entretenimiento como su casco antiguo, Lipscani. Reserva ya uno de nuestros viajes baratos a Lipscani y descubre un fabuloso paisaje arquitectónico con edificios de estilo art nouveau, barroco y neoclásico. Aprovecha para visitar las galerías situadas cerca de monumentos de varios siglos de antigüedad y descansa con las actuaciones de los artistas callejeros. Por el camino, encontrarás numerosas cafeterías con terraza, y, por la noche, los bares y los clubes nocturnos permanecen abiertos hasta la madrugada.
La historia de Lipscani se remonta al siglo XV, cuando se erigió en importante centro comercial y político de Valaquia, que después se convertiría en Rumanía. Durante el siglo XVII, la zona floreció con los talleres de herreros, zapateros, joyeros y curtidores, entre otros oficios. Aunque el barrio sobrevivió a la remodelación socialista de Ceausescu, su estado fue bastante deficiente hasta después de la Revolución rumana de 1989. Actualmente, las calles adoquinadas componen una mezcla de historia y modernidad, elegancia y majestuosidad decadente.
Si te apetece conocer mejor la historia de Lipscani, visita las ruinas de Curtea Veche, la antigua corte real, situada en el extremo sur del barrio. Su origen se remonta al siglo XV, y fue la residencia de los gobernantes de Valaquia, incluido Vlad el Empalador. Aprovecha para visitar también la iglesia de San Antonio, una de las más antiguas de Bucarest, que se encuentra en los alrededores. En su interior podrás contemplar frescos del siglo XVI.
Si decides reservar uno de nuestros paquetes de vacaciones en Lipscani, deja tiempo para caminar tranquilamente por el laberinto de calles que se extienden hacia el norte desde Curtea Veche. Encontrarás impresionantes palacios del siglo XIX, muchos de los cuales tienen carteles explicativos con sus respectivas historias. Entre ellos destaca el palacio del Banco de Ahorros, situado en Calea Victoriei. Acércate después a la iglesia de Stavropoleos para disfrutar de su ambiente tranquilo, y no te pierdas las estatuas de la Edad de Bronce y otros tesoros del país en el Museo Nacional de Historia de Rumanía.
Al final de la jornada, podrás descansar los pies en una de las cafeterías de la zona, especialmente en las ubicadas en la Strada Lipscani, donde las terrazas generan un ambiente parecido al de París. Saborea un café mientras observas a los artistas callejeros. Los viajes a Lipscani también son oportunidades perfectas para recorrer galerías de arte, tiendas de antigüedades y boutiques extravagantes.
Al caer la noche, las diferentes opciones de ocio nocturno te mantendrán entretenido hasta el amanecer. Puedes elegir entre cervecerías, bares de cabaret, elegantes bares lounge y clubes de música a todo volumen.
Puedes llegar fácilmente a la zona de Lipscani en autobús, tranvía o metro desde cualquier rincón de Bucarest. Las estaciones del metro de Piața Unirii 2 y Universitate son las más cercanas.