No hay bell boy.
Llegue con dos niños de dos años, baje en la recepción a preguntar si había alguien que me ayudara con el equipaje, me dijo la recepcionista que estaba sola, pero que en el estacionamiento había un carrito para equipaje, le comenté que traía a dos niños por no decir bebés, y solo me levantó los hombros… al final bajé las cosas con el carrito junto con mis hijos, todavía me hicieron esperar en recepción para darme la llave, subí a la habitación. Marque al restaurante nunca contestaron, marque a recepción, nunca contestaron, tuve que bajar a comprar agua, si bien ya en el restaurante me vendieron el agua, me compartieron la extensión y me dejaron tomarle foto al menú…. Pero recuerdo antes ya haberme quedado en este hotel, pero en esta ocasión fue muy decepcionante.