Déjate enamorar por la espaciosa nave central de la iglesia de Santa Sofía y contempla su impresionante colección de objetos dorados. El lugar que ocupa la estructura ha acogido diferentes templos desde el sigloIV, por lo que su historia está estrechamente relacionada con la de la ciudad. Distintas excavaciones arqueológicas han descubierto nada menos que cuatro templos que se construyeron, destruyeron y volvieron a levantar acompañados de nuevos mitos y leyendas.
La iglesia que vemos hoy se erigió en el siglo VI sobre los cimientos de un templo cristiano anterior y de la necrópolis de la antigua ciudad de Serdica. La monumental basílica con planta de cruz es un ejemplo excelente de la simetría arquitectónica de los diseños de los primeros cristianos. Te recomendamos reservar tiempo suficiente para examinar su fascinante interior, en el que destaca, entre otros elementos, un mosaico increíblemente complejo con decoraciones de plantas y animales que se extienden por el suelo.
También verás esculturas y pinturas ornamentadas en los tres altares de la iglesia, y figuras de santos históricos, como san Jorge y san Vladimir. Y, por supuesto, diferentes monumentos a la patrona de la ciudad, santa Sofía, quien representa tanto a la sabiduría divina como a Sofía la Mártir. Se cree que la presencia de la santa ha protegido al templo de los numerosos desastres naturales y de las transformaciones religiosas que ha sufrido la capital búlgara.
Entre los siglos XI y XIV, la iglesia de Santa Sofía fue declarada iglesia metropolitana y la ciudad se bautizó con su nombre. Al examinar las pinturas doradas de la nave central, es difícil no imaginar las congregaciones de primeros cristianos que habrían llenado regularmente este fascinante edificio.
Con el dominio otomano del siglo XVI, la iglesia se transformó en una mezquita. Posteriormente, dos terremotos en el siglo XIX destruyeron el minarete, y la mezquita cayó en desuso. Quizá te sorprenda saber que la restauración artística de la iglesia no comenzó hasta el siglo XX.
Santa Sofía se encuentra al este del centro histórico de la ciudad, a menos de 30minutos andando de la estación central de tren. La entrada es gratuita y puedes visitarla todos los días de la semana. Quizá quieras aprovechar para acercarte a la Galería Nacional de Arte y a la catedral de San Alejandro Nevski, en los alrededores.