En los viajes a Taormina es difícil no pasar por Porta Catania, una de las dos puertas enfrentadas que se abren al centro histórico de Taormina. Esta entrada del sigloXV, ubicada en la zona occidental, comprende un gran arco que en su momento formó parte de un segmento de las murallas que rodeaban la ciudad. Te recomendamos sacar fotos de las verdes colinas y los valles enmarcados por esta bella estructura medieval.
Si te fijas, podrás examinar el escudo de armas aragonés que adorna la parte superior de la construcción. También verás el emblema de la localidad y la fecha de construcción de la puerta:1440.
En el lado exterior del arco se extiende un valle de intenso verde, mientras que dentro de las murallas encontrarás una animada calle del casco antiguo bordeada de boutiques y restaurantes. Quizá te apetezca tomar algo en una de las terrazas de las cafeterías con vistas despejadas de la puerta.
Aquí, podrás contemplar las bonitas torretas que sobresalen de la parte superior. Te recomendamos volver por la noche para ver el arco iluminado por la luz de una lámpara que cuelga de la dovela. Después te esperan los bares de la calle Corso Umberto, que recorre toda la ciudad.
Y un dato curioso: en tiempos normandos se celebraban reuniones en la plaza ubicada junto a esta entrada. Los lugareños también se refieren a este punto como Porta del Tocco, en referencia al sonido que hacía la campana que daba inicio a estas reuniones.
El acceso a Porta Catania es gratuito y puedes visitarla en cualquier momento. Está situada en la calle Corso Umberto, al oeste del centro de Taormina. Se encuentra a dos minutos andando de la Piazza Duomo en dirección oeste. Si vienes en coche, puedes dejarlo en el aparcamiento ubicado en el lado oeste de la puerta.
Entre las atracciones cercanas se encuentran el ayuntamiento Comune di Taormina, la iglesia del Carmen y la iglesia de Taormina.