La espectacular avenida Unter den Linden termina en la Parisier Platz, una vasta plaza pública que atrae multitudes de turistas que realizan viajes a Berlín a todas horas del día. Observa la elegante arquitectura de los edificios que la rodean y contempla las columnas colosales de una de las estructuras más fáciles de reconocer del mundo: la puerta de Brandeburgo.
Esta plaza abarca casi una hectárea y media y es uno de los sitios más famosos de la ciudad. Antes de la reunificación, la plaza formaba parte de la infame "zona de la muerte" en el lado este, de acceso restringido hasta la caída del Muro de Berlín en 1989. Hoy en día, la explanada está llena de turistas cámara en mano.
Si paseas por los laterales de la plaza verás una serie de edificios elegantes. Encontrarás el histórico Hotel Adlon, que es uno de los grandes hoteles antiguos de Europa, así como varias embajadas de diferentes países y oficinas centrales de bancos, junto con restaurantes y cafeterías.
Aunque la hayas visto en un sinfín de postales y fotografías, la gigantesca puerta de Brandeburgo es mucho más impresionante en persona. Una visita obligada en todos los viajes a Berlín. Pasa bajo los arcos y contempla el linde del gran parque Tiergarten, que se extiende más allá del Berlín Occidental.
Déjate sorprender con las figuras realistas de personajes famosos del museo de cera Madame Tussauds de Berlín, al este de la plaza. La Akademie der Künste (Academia de las Artes), en el lado sur de la plaza, es una opción más elegante. La academia organiza exhibiciones, conciertos, debates, conferencias, espectáculos de danza y otros eventos culturales.
La Pariser Platz es perfecta para salir a explorar el lado oeste de la ciudad. Hay varias atracciones populares en las cercanías, como el edificio Reichstag y el Monumento a los judíos víctimas del holocausto.
La mejor manera de llegar a la Pariser Platz es en transporte público. Coge la U-Banh hasta la estación de Berlin Brandenburger Tor.