Descubre la historia local de Milán desde uno de sus puntos más visitados: Basilica di Sant'Ambrogio. Y, ya que estás aquí, también puedes disfrutar de sus museos y salir de compras.

En este precioso complejo formado por una iglesia y un convento en el centro de Milán, podrás contemplar la célebre obra de Leonardo Da Vinci, La última cena.

Esta iglesia del siglo XV es conocida por los frescos de sus paredes y el museo arqueológico en el interior de un histórico convento.

Es posible que Hospital San Giuseppe sea lo que te trae a este destino, pero recuerda que Milán esconde otros rincones fantásticos que seguro que te sorprenden.

Si lo tuyo es el turismo cultural, aprovecha para visitar Casa degli Atellani, uno de los rincones más interesantes de Milán. Además, aquí también podrás salir de compras o visitar una majestuosa catedral.

Museo Martinitt e Stelline es, sin duda, uno de los rincones más ricos en historia de Milán. ¡No te vayas sin hacerle una visita! Además, aquí también podrás disfrutar de su panorama artístico y sus museos.