Las Montañas de Mármol forman un conjunto compuesto por cinco afloramientos rocosos que se elevan sobre la ciudad de Da Nang, que parece empequeñecerse a sus pies. Estas formaciones de mármol y piedra caliza esconden túneles, cuevas y santuarios budistas. Disfruta de un recorrido por este popular lugar de peregrinación en tu viaje a Da Nang y descubre las diferentes montañas, cuyos nombres hacen referencia a elementos naturales: Madera, Metal, Tierra, Fuego y Agua.
Son Thuy, o “agua”, es la montaña más grande del conjunto y la más visitada. No dejes de subir a la cima para descubrir unas vistas increíbles, ya sea a través de las escaleras de piedra o, por un módico precio, en ascensor. Después, explora las cuevas y lugares de culto de la montaña.
Recorre la puerta Ong Chon y fíjate en los agujeros de bala, vestigios de la guerra de Vietnam. Detrás de la puerta encontrarás cuevas con estatuas de Buda de cemento. Continúa hasta la cueva Van Thong y detente para ver el gran Buda de cemento que se encuentra frente a la entrada.
Entra en la cueva Linh Nham y admira el efecto que crean los rayos de luz al pasar a través de pequeños agujeros. Por último, adéntrate en la gran cueva Huyen Khong para ver los santuarios budistas y confucianos. Durante la guerra de Vietnam o, como se conoce en el país, la guerra de EE.UU., el ejército estadounidense utilizó esta cueva como hospital militar.
Resérvate un poco de tiempo para explorar las cuatro formaciones más pequeñas de las Montañas de Mármol. En ellas también encontrarás cavernas, santuarios y pagodas, como la pagoda Quan Am, en la montaña Kim Son, o “metal”. Detrás de la pagoda hay una gruta de estalactitas y estalagmitas que han creado formas fascinantes.
Hay que pagar una pequeña tasa para acceder a las montañas. Te recomendamos que compres un mapa junto con la entrada, pues incluye información sobre las cimas y la ubicación de las cuevas y santuarios.
Las Montañas de Mármol se encuentran a unos oncekilómetros al sureste del centro de Da Nang. Puedes llegar en autobús, coche de alquiler o taxi. Dado que se trata de una atracción budista que goza de popularidad, las montañas atraen a gran cantidad de visitantes, especialmente durante los fines de semana. Si quieres evitar las grandes multitudes, programa tu visita un día laboral.