Situada a mitad de camino entre el ambiente de Hanoi y la frenética Ho Chi Minh, Da Nang se está creando una reputación propia como un emplazamiento excelente desde el cual visitar reliquias fascinantes y disfrutar de pintorescas playas.
Da Nang tiene una larga historia que deja ver recuerdos del pasado en todas partes. Busca la influencia francesa en la arquitectura de la ciudad y visita las ruinas de las bases militares de la guerra de Vietnam.
Descubre el pasado más reciente de Da Nang en el museo de escultura Cham. Aquí verás cientos de imágenes y artefactos de los siglos pasados. Visitalas distintas pagodas que hoy se consideran auténticos iconos de la ciudad. Especialmente, la deslumbrante pagoda Phap Lam. No te pierdas la catedral de Da Nang, rosa y gigante, conocida por los residentes como la iglesia “Con Ga” o del gallo, debido a su veleta.
Hubo un tiempo en que en Da Nang solo había dos puentes, uno construido por los franceses y, el otro, por los americanos. En la actualidad, el orgullo de la ciudad es el puente del río Han, el primero que diseñaron y construyeron los propios vietnamitas.
En sus 30 kilómetros de costa, las oportunidades para nadar, pescar, practicar esquí acuático y disfrutar de un baño de sol son infinitas. La playa My Khe, conocida como “la playa china” durante la guerra de Vietnam, cuando era el lugar favorito de los soldados americanos para relajarse, puede considerarse ahora un trocito de paraíso de alta gama. Si te apetece algo más tranquilo, busca la playa Lang Co, que transcurre, delimitada por palmeras, entre una lagunaturquesa y el mar.
No te pierdas las conocidas como montañas de mármol, al sur de Da Nang. Se trata de cinco colinas de piedra caliza y mármol, que adquirieron sus nombres de los cinco elementos: fuego, agua, tierra, metal y madera. Los exploradores más atrevidos encontrarán aquí túneles, cuevas y templos, junto a vestigios diversos de la guerra. La vista desde la cima resulta especialmente cautivadora.
El clima de Da Nang es tropical y la estación de lluvias transcurre entre septiembre y diciembre. Entre mayo y agosto es cuando el mar está más tranquilo. Puedes acceder a la ciudad fácilmente en tren, autobús o avión.