Recorre uno de los numerosos pasajes con encanto de Valparaíso, el Paseo Gervasoni del cerro Concepción. Esta calle adoquinada forma parte de lo que antiguamente era el Fuerte Concepción, una fortaleza que protegía la ciudad de los ataques de los piratas. En la actualidad, acoge un mirador y un mercadillo de artesanía, y sirve lugar de descanso después de subir y bajar las empinadas calles de la ciudad.

Se tardan pocos minutos en recorrer el Paseo Gervasoni, pero este lugar cuenta con suficientes atracciones como para reservarle el tiempo que merece. Siéntate en uno de los bancos y disfruta de las vistas de la bahía, donde los cargueros y las embarcaciones de pesca entran y salen del puerto. Intenta señalar populares puntos de referencia como el Reloj Turri. Si el día es claro, quizá puedas ver las playas de la cercana Viña del Mar.

La mayor parte de los días, verás puestos de artesanos locales a lo largo de la calle. En ellos podrás adquirir joyería hecha a mano, bolsos y camisetas con los lugares más populares de la ciudad e imágenes clásicas de Valparaíso.

Echa un vistazo también a las mansiones coloniales de colores pastel que bordean la calle. Datan de finales del siglo XIX, cuando los inmigrantes ingleses y alemanes diseñaron un barrio de paseos, plazas y escaleras. Algunas de ellas están ocupadas hoy por hoteles y restaurantes con terrazas en la azotea. En el extremo norte del paseo se encuentra el histórico Gran Hotel Gervasoni, cuya terraza ofrece una de las mejores vistas de la bahía.

La forma más sencilla de llegar es tomar el ascensor Cerro Concepción, que sube desde la avenida Prat. También puedes ir a pie desde el centro por las callejuelas serpenteantes que recorren la colina.

El Paseo Gervasoni se encuentra a poca distancia andando de otros lugares de interés, como la iglesia anglicana de San Pablo, construida por los ingleses.

Visita el Paseo Gervasoni y disfruta de una bonita colección de mansiones coloridas y de vistas panorámicas espectaculares.