La Garganta del Diablo es la más ancha de las 275 cataratas que componen el conjunto conocido como cataratas del Iguazú. Con sus 80 metros de alto y su caída ininterrumpida de agua, es la protagonista indiscutible de toda visita a las cataratas del Iguazú. Las cataratas delimitan la frontera entre Brasil y Argentina.
A la entrada del Parque Nacional del Iguazú se cogen los autobuses de enlace que van hasta el circuito de las cataratas, que discurre por un camino enmaderado. El sendero conduce hasta varios miradores, dispuestos en tres niveles diferentes, que ofrecen magníficas vistas de la Garganta del Diablo, cuyas aguas bullen sobre el borde antes de precipitarse a toda velocidad sobre el río. Hay ascensores que permiten subir hasta el nivel más alto. Los miradores ofrecen puntos de excepción para sacar excelentes fotografías, especialmente cuando se conjugan el sol y la niebla para formar arcoíris.
También es posible disfrutar de estas enormes cataratas visitándolas en lancha motora. Hay rocas que impiden acercarse hasta la misma catarata, pero tendrás oportunidad de acercarte lo suficiente como para sentir toda su fuerza. Asegúrate de llevar la cámara y los objetos de valor bien protegidos, ya que te vas a mojar seguro.
Para apreciar plenamente toda la magnitud de la Garganta del Diablo, contémplalas también desde la parte argentina de las cataratas del Iguazú. Allí podrás tomar un tren hasta el punto inicial del Paseo de la Garganta del Diablo, que conduce hasta un mirador desde el que se disfruta de vistas de cerca de las cataratas desde lo alto. Maravíllate viendo cómo se precipita vertiginosamente el agua hasta el río levantando nubles de niebla.
La Garganta del Diablo del Parque Nacional de Iguazú se encuentra a 20 minutos por carretera del centro de la ciudad de Foz de Iguazú. Hay un servicio público de autobuses regular entre el centro de la ciudad y el parque nacional. Si vienes en coche, puedes utilizar el aparcamiento con parquímetro que hay a la entrada. Para llegar hasta la parte argentina hay que viajar en autobús desde la estación de autobuses de Foz de Iguazú. No te olvides el pasaporte. Muchos hoteles también organizan excursiones de un día desde Foz de Iguazú hasta la parte argentina de las cataratas del Iguazú.
Es posible visitar la Garganta del Diablo durante las horas de apertura del Parque Nacional de Iguazú, que abre todos los días. Consulta el sitio web oficial del parque para obtener información sobre horarios y tarifas. Para visitar las cataratas es preciso pagar entrada tanto en la parte brasileña como en la argentina.