Los viajes a Génova prometen la posibilidad de ver impresionantes mansiones del sigloXVI, pero la única que se ha convertido en un museo es la Galería Nacional de Liguria, en el Palacio de Spinola. Te recomendamos añadirla a tu itinerario para contemplar algunas de las pinturas más aclamadas de la ciudad, que embellecen las paredes de las decadentes habitaciones de esta ilustre vivienda. Recorrerás elegantes pasillos con suelos de mármol y altos techos con frescos tan bellos como las obras de arte de las exposiciones.
Génova fue, en su momento, una de las poblaciones marítimas europeas más prósperas, y sus comerciantes lograron acumular una gran riqueza durante los siglosXVIyXVII. Resulta muy interesante conocer su estilo de vida y apreciar la arquitectura y el mobiliario de las clases altas de la época. Los marqueses Francesco y Paolo Spinola donaron el palacio y su contenido al Estado italiano en1958.
El Palacio de Spinola lo construyó Francesco Grimaldi, pero fue propiedad de varias familias durante los siglos siguientes, cada una de las cuales amplió la valiosísima colección de pinturas que ahora adorna las paredes y en la que destacan los trabajos de grandes artistas genoveses, flamencos y europeos, como Anton van Dyck, Joos van Cleve, Pedro Pablo Rubens, Valerio Castello o Luca Giordano, entre muchos otros. Además de los cuadros, también verás colecciones importantes de objetos de cerámica.
Te recomendamos recorrer las cuatro plantas del palacio, repletas de reliquias que dan testimonio de la orgullosa historia y el esplendor de Génova. Las dos inferiores acogen las habitaciones restauradas del palacio, con piezas espectaculares de decoración y mobiliario, mientras que la galería ocupa las dos plantas superiores. La amplia variedad de objetos abarca desde prendas de vestir del sigloXV hasta impresionantes frescos y relucientes espejos.
La Galería Nacional de Liguria en el Palacio de Spinola está situada en la Piazza di Pellicceria. El museo abre de martes a domingo, aunque en este día se reduce el horario. Puedes acceder gratis el primer domingo del mes. El resto de los días, hay que pagar una entrada muy económica. La galería está a solo diez minutos a pie del Palacio Ducal, donde hay zona de aparcamiento.