4/10
El hotel tiene una ubicación aceptable, lo cual es probablemente uno de sus pocos puntos positivos. Sin embargo, la experiencia general dejó mucho que desear.
Para empezar, el servicio de limpieza fue prácticamente inexistente. Durante mi estancia, tuve que bajar tres veces a recepción para pedir toallas limpias y que al menos limpiaran el baño, algo que debería ser un estándar básico. Esto refleja una falta de atención al huésped que resulta frustrante.
Otro punto decepcionante fue el desayuno. Cobran casi 20 € por persona, un precio que simplemente no justifica lo que ofrecen. Es un menú muy básico, que en mi opinión no vale ni la mitad de lo que cuesta.
Además, las instalaciones no están diseñadas para personas altas, como en mi caso. Las puertas tienen apenas 1,90 m de altura, lo que me llevó a golpearme varias veces. Un detalle que puede parecer menor, pero que resulta incómodo y poco práctico. El ascensor, por otro lado, es diminuto y terriblemente lento, lo que complica mucho su uso, especialmente si llevas equipaje.
En resumen, no recomendaría este hotel para familias o para estancias de placer. Quizás para una persona sola en viaje de negocios podría ser funcional, pero definitivamente no es un lugar al que volvería. Hay muchas opciones mejores por un precio similar.
Julian
Se alojó 4 noches en noviembre de 2024