Contempla el esplendor arquitectónico de La Habana Vieja en la plaza de la Catedral. En este espacio rodeado de bellos puntos de referencia de estilo barroco, podrás disfrutar de exposiciones de arte y comprar objetos hechos a mano en el mercado de artesanía. La de la Catedral fue la última de las plazas principales que se crearon en La Habana Vieja. Está situada sobre un antiguo pantano y originalmente se llamaba la plaza de la Ciénaga.
Su elemento más destacado es la catedral, cuyo nombre oficial es catedral de San Cristóbal de La Habana. Esta iglesia, construida entre 1748 y 1777, es uno de los mejores ejemplares de arquitectura barroca de la ciudad. Contempla la hermosa fachada, con capiteles, columnas y campanarios asimétricos. En el interior podrás ver obras de varios artistas destacados, como Bartolomé Murillo y Pedro Pablo Rubens.
Al otro lado de la catedral se encuentra la casa del Conde de Casa Bayona, que aloja el Museo de Arte Colonial. Aquí podrás ver exposiciones de muebles y elementos de decoración antiguos muy habituales en las residencias coloniales de La Habana. También verás colecciones de porcelana, cristalería y flores decorativas, que representan el estilo de vida aristocrático de aquella época.
El palacio del Conde de Lombillo, con una bella galería y ventanas decorativas, es otro de los edificios destacados de la plaza. Frente a este se encuentra la casa del Marqués de Aguas Claras, que alberga un restaurante con un patio muy elegante. Observa el mural que pintó Andrés Carrillo en la calle Mercaderes. En él aparecen varios personajes ilustres de la época de la dominación española en Cuba.
Acércate después a los puestos del mercado de artesanía de la plaza. Podrás comprar toda clase de artículos hechos a mano, desde pinturas al óleo hasta estatuillas, joyas y prendas de encaje. No pierdas la oportunidad de charlar con los vendedores, muchos de los cuales utilizan atuendos tradicionales de muchos colores. Los restaurantes suelen contar con terraza, por lo que son excelentes sitios para disfrutar de un cóctel frío de cerveza o ron mientras observas el paisaje.
La plaza de la Catedral está situada en el centro de La Habana Vieja, a unos pasos de otras atracciones principales de la ciudad. El Museo de la Revolución, la plaza de Armas y la plaza Vieja están a menos de diez minutos a pie. El Malecón, un bello bulevar ubicado frente al mar y enmarcado por bonitas casas de colores pastel, también está en los alrededores.
