La catedral de Zagreb presume de una magnífica ubicación en la ciudad alta, en plena plaza Kaptol, y es visible desde casi cualquier ángulo de Zagreb. Además, su magnífica arquitectura neogótica le ha brindado un especial prestigio. Aunque el templo continúa activo como lugar de oración, los fieles suelen mezclarse con la cantidad de turistas que se acerca a visitar la espectacular arquitectura de la catedral. Te fascinará la visión desde sus icónicas torres, así como su interior, que presenta una elegante decoración sacra, con magníficas vidrieras, obras en bajorrelieve y altares neogóticos.
La construcción de este templo, que también recibe el nombre de catedral de la Asunción de la Virgen María, se completó a finales del siglo XIX y su estructura pretendía reemplazar la anterior, que acabó destruida por un terremoto. El arquitecto encargado de dicha reconstrucción fue Hermann Bollé. Añadió al edificio las famosas torres con campanario, que miden 108 metros de altura. Si te interesa conocer más obras de Bollé, acércate al cementerio Mirogoj de Zagreb.
Accede a la catedral para admirar su inmensa nave, donde caben hasta 5000 personas. Aunque su interior es mucho más austero que el exterior, te fascinará la calidad y exquisitez de sus toques artísticos. De hecho, deberías acercarte a contemplar las capillas, cuyas coloridas vidrieras datan del siglo XIX. No te olvides de visitar el sepulcro del arzobispo croata Alojzije Stepinac, pues este polémico personaje fue acusado de colaborar con el régimen Ustasha, aliado del Eje Nazi, durante la Segunda Guerra Mundial al tiempo que ayudaba a salvar las vidas de los judíos croatas. En su tumba se pueden observar relieves tallados por el escultor croata Ivan Meštrović.
Aprovecha también para admirar las obras religiosas que cuelgan de los muros de la iglesia. Te maravillarán las pinturas al fresco del siglo XIII de la sacristía, además del tríptico realizado por el pintor renacentista alemán Albrecht Dürer, que decora el altar lateral. También puedes aprovechar para asistir a una misa o presenciar los conciertos de órgano que se organizan de vez en cuando. Antes del viaje, comprueba si hay algún evento programado que coincida con tu visita.
La catedral de Zagreb abre todos los días, con horario reducido los domingos. La entrada es gratuita. Para llegar hasta aquí, coge un funicular hasta la parte ciudad alta de Zagreb. La catedral se encuentra en lo alto de una colina y sus torres son visibles de la mayor parte de la ciudad, así que podrás usarlas como punto de orientación.