Un hotel ideal si lo que se busca es un hotel de para disfrutar del entorno de montañas, tranquilo, sencillo y sin pretensiones. El desayuno con productos propios "espectacular" (tienen hasta aceites de sabores, unas fresas frescas cortadas en trocitos, unas tartas, hummmm….). Se aparca en la puerta y se accede andando en 3' al centro del pueblo para degustar quesos y sidras, jejeje...