Castillo de Thirlestane

El lugar se vende como hotel, pero parece más hostal, al llegar te dicen que tienen un poco de todo, tanto de hotel boutique como de hostal. El lugar está muy céntrico, a 8 minutos caminando de la estación de tren, y a no más de 15 minutos a cualquier punto turístico de Edimburgo, tiene muy cerca tiendas como Tesco, para poder comprar tus alimentos, tiene también muchos bares alrededor incluyendo uno a un lado qie pertenece al hotel. El ruido del bar llega a las habitaciones, así que no se puede descansar muy bien, los sábados termina la fiesta a las 4am, otros días a las 2am. El día que llegamos (a las 12pm) nos resguardaron las maletas mientras daba la hora del check in, nos regresamos a las 2:30pm debido a que me sentía muy mal y quería recostarme, nos vieron a esa hora y si notaron en recepción que me sentía mal, a las 3 nos acercamos para hacer el check in, pero no tenían disponible la habitación, nos pidieron unos minutos ya que estaban terminando de limpiarla, y así nos trajeron hasta pasadas las 4pm, que no indicaron que todavía se iban a tardar, ya que había otras antes que la nuestra, terminamos haciendo check in a las 7pm. Al día siguiente hicieron la limpieza al cuarto, dejando de lado el baño, que quedó sucio, el siguiente día ni se tomaron la molestia de entrar, no se hizo limpieza. El pasillo del elevador, en el piso que da a recepción y al bar, estuvo plegostioso 2 días, las mesas del desayuno tampoco se limpiaron. El agua para tomar del baño, salía blanca.

Overall a gem. The location is perfect with access to the train station, the royal mile and market street. Quiet and great rooms. The only complaint is the small and slow elevator, which is nothing. Will be staying here again, loved the hotel and the staff