Vuelos baratos a Kaga

En Kaga solo encontrarás un aeropuerto, que es Komatsu (KMQ).

Este aeropuerto está a 16 km del centro.

La respuesta es sencilla: KMQ (a 16 km), el único aeropuerto de Kaga.

En total, 4, que ofrecen rutas desde 4 aeropuertos.

Las líneas aéreas principales son JAL y ANA; y el vuelo de JAL que sale de Distrito de Ashigarashimo es de los más populares.

Tienes 112 vuelos directos a la semana.

Por lo general, los vuelos con mayor demanda salen de los aeropuertos de Tokio, Fukuoka y Naha.

La duración del vuelo depende de tu aeropuerto de origen: desde Tokio son 1 h y 1 min; desde Fukuoka, 1 h y 25 min, y desde Naha, 2 h y 10 min.

Para ahorrar en el billete de avión, lo más básico suele ser no dejar la reserva para última hora. Otra estrategia es informarte de todas las posibilidades de tu destino: quizás encuentres una buena oferta en una terminal más pequeña. No te olvides de un último consejo: compra en cuanto encuentres una buena tarifa. En lo que respecta a los vuelos, gana el más veloz.

Aquí tienes algunas ideas para que tu viaje sea de lo más agradable.Para empezar, recuerda la importancia de llevar contigo algunas cosas: por ello, no te olvides de subir a cabina lo que quieras usar durante el vuelo. Un cepillo de dientes, medicamentos, un libro, el cargador o un cojín cervical te harán disfrutar de un viaje agradable.Por otro lado, mira a fondo todos los bolsillos de tu maleta de cabina, también los más pequeños, para asegurarte de que no se te cuelan objetos prohibidos. Por ejemplo, objetos afilados, como cuchillos, tijeras o navajas suizas, productos inflamables o envases con líquidos que excedan los 100 ml.Y, para acabar, aunque nos encante ir siempre de punta en blanco, para viajar en avión, la comodidad es lo primordial, especialmente en trayectos largos. Decídete por prendas transpirables y una manga larga por si necesitas entrar en calor, y lleva calzado cómodo para que no se te hinchen los pies. Además, dejar para otro momento la ropa ajustada te permitirá moverte con total comodidad y reducirá el riesgo de sufrir el síndrome de la clase turista.

Si te fijas en estos aspectos, el control de seguridad será un mero trámite: Lleva en un sitio visible tu documento de identidad o pasaporte y la tarjeta de embarque; es lo primero que vas a necesitar. No pases por el arco de seguridad con monedas en el bolsillo o con tu cinturón puesto, ya que deberás volver atrás y perderás algo de tiempo antes de subir a bordo. Ten en mente que los ordenadores portátiles, las tabletas y dispositivos parecidos deben ser fáciles de sacar de entre tus pertenencias, porque tienen que ir en otra bandeja al pasar el control. Puedes llevar líquidos a bordo, pero cada bote no puede superar los 100 ml y, en total, debe sumar un máximo de 1 l. Las botas, los zapatos de plataforma o los tacones te comen espacio en la maleta, aunque si te pones este tipo de calzado el día del control, tendrás que quitártelo; tenlo en cuenta. Y, sobre todo, mira un par de veces que no se te haya colado ningún objeto punzante, como cuchillos, tijeras, etc., en la bolsa de mano; puedes meterlo en la maleta facturada.