Vuelos baratos a Cheb

Al viajar en avión, solo tienes una opción: Praga (PRG-Václav Havel) es el aeropuerto de Cheb.

Tienes para elegir 48 compañías aéreas que conectan este destino con 115 aeropuertos nacionales e internacionales.

British Airways es la principal aerolínea que trabaja en Cheb, y el vuelo desde Londres con British Airways es uno de los más populares.

Si no te gustan las escalas, tienes 858 vuelos directos cada semana.

Hay muchos viajeros que llegan a este destino desde Londres, Ámsterdam y París.

Puede variar según tu ciudad de origen: desde Londres pasarás en el avión 1 h y 57 min; desde Ámsterdam, 1 h y 28 min, y desde París, 1 h y 43 min.

Cualquiera que viaje con frecuencia te recomendará que no esperes al último momento para reservar tus billetes de avión: los precios no suelen ir a la baja. Otra estrategia es consultar todas las opciones a tu alcance: posiblemente des con un buen precio en una terminal más pequeña. No olvides lo más importante: reserva tan pronto como veas una buena tarifa. En lo que respecta a los billetes de avión, hay que ir rápido.

Si no quieres que el viaje te resulte demasiado pesado, tenemos el mejor remedio: una lista con consejos básicos para que tus vacaciones arranquen bien.Asegúrate de añadir todo lo que quieras llevar contigo en el equipaje de mano. No pueden faltar el cepillo de dientes, un libro electrónico o una tableta con muchas películas, un cargador universal, medicamentos y algo de dinero por si te apetece algún capricho.Por otro lado, mira a fondo todos los bolsillos de tu bolsa de mano, también los ocultos para asegurarte de que no se te cuelan objetos prohibidos. No puedes subir navajas, tijeras, productos inflamables o envases de más de 100 ml; ante la duda, busca la lista completa.Y, para finalizar, por más que nos guste salir elegantes en las fotos, en el avión, la comodidad es lo primero, sobre todo si el trayecto es largo. Un buen zapato es esencial; piensa que es muy común que se hinchen los pies y los tobillos. Por otro lado, las prendas holgadas o las medias de compresión te ayudarán a ahorrarte el síndrome de la clase turista.

Si te fijas en estos aspectos, el control de seguridad será un mero trámite: Ten a mano tu documento de identidad o pasaporte y la tarjeta de embarque; es lo primero que te van a pedir. No cruces el arco de seguridad con monedas en el bolsillo o con el cinturón puesto, ya que deberás volver a repetir el proceso y perderás tiempo antes de subir a bordo. Ten en mente que los ordenadores portátiles, las tabletas y dispositivos parecidos deben estar visibles entre tus cosas, ya que los tendrás que colocar aparte al pasar el control. Puedes subir líquidos, pero cada bote no puede exceder los 100 ml y, en total, debe sumar 1 l como máximo. Evita llevar tacones, plataformas o de suela muy gruesa; si no, tendrás que quitarte los zapatos y el proceso se alargará. Y no te olvides, mira un par de veces que no se te haya quedado algún objeto peligroso, como cuchillos, tijeras, etc., en el equipaje de mano; puedes meterlo en la maleta que factures.