Reserva tiempo en tu itinerario para la Ventana de Dios, uno de los rincones más espectaculares de Sudáfrica. Este mirador paisajístico se encuentra situado en el cañón del río Blyde y ofrece vistas de la meseta baja, el llamado Lowveld sudafricano, una gigantesca región subtropical que alberga cataratas, formaciones rocosas, precipicios y bosques.
Trae los prismáticos y la cámara y acércate a la pequeña plataforma de observación que se ha construido en el lateral de un escarpe. Estarás a unos 700 metros de altura por encima del valle. Si el día es soleado, podrás ver las montañas Lebombo, que hacen frontera con Mozambique.
Aprovecha la visita para hacer una ruta de senderismo por la selva tropical, a menudo envuelta en bruma. La Ventana de Dios es una reserva natural y, entre otras especies, puedes que te encuentres con babuinos, antílopes, cocodrilos y monos.
El mirador forma parte de la Ruta Panorama, una larga carretera que atraviesa la cordillera de Drakensberg y pasa por distintas maravillas naturales y muchos otros miradores. Asegúrate de visitar algunos de estos rincones durante la excursión. Te recomendamos, por ejemplo, las cataratas de Lone Creek y Mac Mac, las Pozas de la Suerte de Bourke y las cimas redondas de Los tres Rondavels.
La Ventana de Dios está situada a poco más de 200 kilómetros al norte del corazón de Mpumalanga. Muchos visitantes que recorren la Ruta Panorama se alojan en las distintas localidades y aldeas de la zona, como Sabie, Graskop y Hazyview. Encontrarás un amplio abanico de tipos de alojamiento que incluyen complejos turísticos con spa y refugios de caza.
Para acceder al mirador, deberás abonar unos cargos de entrada que también incluyen el aparcamiento. Durante la visita, puede que te encuentres con vendedores de recuerdos. Si ves algo que te guste, no tengas reparo en regatear mucho, ya que se espera que lo hagas. Te recomendamos llegar temprano en un día de sol para evitar las multitudes.