Esta torre redonda, Rundetårn, es un observatorio del siglo XVII que se eleva sobre el centro peatonal de Copenhague. Sube a lo más alto para disfrutar de una vista panorámica de 360° de la ciudad o para observar el cielo con otros astrónomos aficionados. La Rundetårn también alberga una galería, una sala de conciertos y hasta una pequeña iglesia.
Construida bajo el reinado de Cristián IV de Dinamarca a principios del siglo XVII, la Rundetårn sigue siendo una de las principales obras arquitectónicas de la capital. Antiguamente era un centro de investigación astronómica de la Universidad de Copenhague, pero se ha convertido en un centro cultural abierto al público.
Una empinada escalera rodea de la columna central interior: un ejemplo de progreso notable para la arquitectura de la época. Sube a la cima y admira las exposiciones que encontrarás por el camino.
A la mitad del recorrido se encuentra la Sala de la Biblioteca, un centro cultural. Allí tienen lugar exposiciones de arte contemporáneo, descubrimientos y proyectos científicos llevados a cabo por los estudiantes de la ciudad. También se celebran conciertos. Una vez a la semana es posible escuchar música jazz, clásica o popular en este entorno único.
Sigue subiendo hasta la plataforma de observación, situada a 34 metros de altura. En el bar podrás pedir una bebida y sentarte en un banco para observar la actividad del puerto a lo lejos.
Otro estrecho tramo de escaleras te lleva al observatorio. Durante el verano, todos los domingos por la tarde es posible mirar el sol a través de un telescopio solar. Los aspirantes a astrónomos también pueden visitar el observatorio algunas noches para contemplar las estrellas y descubrir constelaciones lejanas. Consulta el sitio web de la torre para más detalles.
La Rundetårn se encuentra en el centro de Copenhague y es fácilmente accesible a pie o en bicicleta. La estación de metro Nørreport está a poca distancia y hay aparcamiento limitado de pago en las calles que rodean la estación. La Rundetårn abre todos los días de marzo a octubre el horario se amplía en los meses de verano. Se paga un precio módico para entrar. La torre no dispone de ascensor.