Planta baja: Salón-comedor (TV, DVD, WiFi), puertas a terraza. Cocina (horno, microondas, lavavajillas). Lavadero (lavadora). Habitación doble con salida a terraza y A/A portátil. Habitación doble con aire acondicionado portátil. Tres cuartos de ducha. Acceso exterior sólo al dormitorio doble y A/A portatil con ducha en suite. Primera planta: Zona de lectura con puertas a la terraza. Habitación doble con ducha en suite, vestidor y puertas a la terraza. Amplia terraza con vistas al mar. Anexo: Habitación doble con A/A portatil. Habitación doble con A/A portatil con puertas a la terraza. Cuarto de baño con ducha. Cocina (microondas, placa de cocción, nevera/congelador, lavadora). Exterior: Amplias vistas al mar y terreno cerrado. Barbacoa de gas portátil. Terraza cubierta con comedor. Bañera de hidromasaje. Tenis de mesa. Terrazas para tomar el sol. Aparcamiento privado. Acceso directo a la playa.
Desde una posición privilegiada, acurrucada entre dos de las calas de arena más apreciadas de Mallorca (Cala Mondragó y Cala S'Amarador), esta resplandeciente casa de campo está inmersa en el entorno natural y puro del legendario Parque Nacional de Mondragó, abundante en fauna local y pinos de sombra que proporcionan un bienvenido respiro del sol del mediodía.
Su ubicación frente al mar se ve reforzada por el hecho de tener dos pintorescas playas literalmente en la puerta: a un lado, un suave paseo de 5 minutos se ve recompensado con las arenas blancas y finas de Cala Mondragó, donde las aguas cristalinas y poco profundas ofrecen el entorno perfecto para practicar el buceo y los sabrosos aromas salen de un pequeño chiringuito situado en la arena cercana. Un paseo en la dirección opuesta revela la menos frecuentada pero igualmente impresionante Cala S'Amarador. Veleros y goletas entran y salen de la bahía, para admirar el panorama tan fervientemente descrito por muchas guías y viajeros precedentes. Ambas playas ostentan el prestigioso galardón de la Bandera Azul por la limpieza de sus aguas, son aptas para sillas de ruedas y cuentan con un socorrista durante la temporada alta.
La suave resonancia del mar al chocar con este enclave rocoso marca el tono de este retiro: uno de relajación, ya que el ritmo de vida se reduce una o dos veces, el abundante aire fresco del mar se sirve con una generosa porción de vistas de gran alcance difíciles de superar. Los estrechos caminos bordeados de arbustos serpentean a través de los amplios terrenos, convergiendo en una encantadora y alocada terraza pavimentada que acapara las espectaculares vistas de la bahía poco profunda, mezcladas con el abrazo de una fresca brisa marina.
La fachada frontal, característica de la región, está formada por sólidos arcos de piedra y esquinas simétricas, mientras que las contraventanas de madera proporcionan los adornos a esta encantadora vista, el foco central recae naturalmente en la gran puerta de madera que conduce a un imponente hall de entrada. En el interior, los amplios dormitorios y las grandes zonas de reunión para grupos proporcionan un agradable ambiente de vacaciones en el que relajarse. Una reciente renovación del interior ha creado una impresionante transformación, incorporando camas con dosel, telas de colores brillantes y un toque de elegancia con rafia y acabados de madera desgastados. La casa principal consta de cuatro habitaciones, mientras que un anexo separado con dos habitaciones dobles adicionales, incluye una cocina que permite un poco de independencia del resto del grupo - si así lo desea.
La histórica ciudad de Santanyi, con su muralla fortificada y su puerta (Porta Murada) es un paraíso para los amantes de la gastronomía, mezclado con galerías de arte, calles empedradas, plazas sombreadas y tiendas boutique, mientras que el bullicio del mercado semanal contrasta con el aura chillout de la Finca Mondragó S'Amarador, a pocos minutos.
La cadena de calas rocosas y ensenadas de arena que recorren la costa sureste de esta diversa isla están al alcance de la mano: una excursión en barco a la isla de Cabrera, montar a caballo por los senderos de arena de la reserva natural o seguir una de sus populares rutas de senderismo - hay más que suficiente para mantener entretenidos a los más activos, aunque ciertamente se le perdonaría a uno si su única salida fuera al supermercado más cercano para abastecer la nevera, antes de acomodarse en una de las terrazas al sol, con un buen libro y una copa de rosado frio en la mano. (Además, si lo que se necesita es pan fresco y cruasanes para el desayuno, María, la ama de llaves, estará encantada de traerlos por la mañana).
Licencia de propiedad nº ETV/1272 Debido al fácil acceso al mar, los niños pequeños deben ser supervisados en todo momento. Debido a la ubicación en una reserva natural, está prohibido encender fuego.
Tenga en cuenta que, además del alquiler de la propiedad, hay que pagar un impuesto turístico local. Recogemos este impuesto antes de su salida y lo remitimos en su nombre. 2,00 euros (2,20 euros incl. IVA) por noche para las primeras 9 noches, 1,00 euros (1,10 euros incl. IVA) por noche para cada noche posterior.
