Pasea entre las ruinas de un antiguo templo griego megalítico e investiga entre los restos de una vieja fortaleza mientras escalas La Rocca. Este promontorio rocoso es la característica más notoria de Cefalú y se eleva 270metros por encima de la ciudad.
Los normandos crearon en este lugar una de sus grandes fortificaciones, considerada una de las bases defensivas naturales más impresionantes del mundo.
Para llegar al fuerte, sube por la larga escalera tallada en la roca. Tardarás alrededor de media hora en alcanzar la cima. No te olvides de llevar calzado resistente. Tu esfuerzo será recompensado con una impresionante vista de la costa siciliana bajo tus pies. Mira hacia el oeste y, si el día está despejado, verás el litoral cercano a Palermo. Hacia el este, puede que distingas la península del cabo de Orlando.
Camina por las murallas de la fortaleza, a gran altura sobre la ciudad, e intenta figurarte la disposición del antiguo edificio de defensa. Gran parte de la estructura se ha desmoronado y resulta difícil distinguir sus salas y torres.
Luego, continúa con el Templo de Diana. Este santuario está construido con inmensas rocas encastradas, sin cemento ni hormigón. Atraviesa el portal de piedra del templo y avanza hasta las ruinas de sus salas. Los investigadores no coinciden en la fecha exacta en la que se construyó este edificio, pero algunos opinan que se remonta al 800a.C.
Es imposible pasar por alto La Rocca al visitar Cefalú, ya que se observa desde casi todos los puntos de la ciudad. Para realizar el arduo camino hasta la cima, evita las horas centrales del día, cuando las temperaturas son más altas.