Megève es uno de los destinos de montaña preferidos entre la clase alta. Podrás codearte con la jet set en sus espléndidas pistas de esquí y en sus elegantes tiendas. Esta bonita aldea medieval, enclavada entre boscosas montañas, ofrece una sofisticada gama de bares, restaurantes y boutiques.
Megève se convirtió en un destino turístico en la década de 1920, cuando la baronesa Noémie de Rothschild decidió establecer aquí una estación de esquí para competir con Suiza y su St. Moritz. La baronesa contrató a un arquitecto para que diseñara los refinados chalets que la caracterizan muchos de ellos se conservan todavía.
En invierno, todos viajan a Megève para disfrutar de sus pistas de esquí. Puedes comprar un forfait Evasion Mont Blanc, que te permite acceder a 444 kilómetros de pistas arboladas. Con distintos niveles de dificultad y una famosa escuela de esquí, Megève es ideal para los principiantes. Tanto si visitas la zona en temporada de esquí como si vienes en verano, utiliza la telecabina para subir a la cima del Mont d'Arbois, que ofrece unas vistas excepcionales del Mont Blanc.
Tras un día de esquí o de senderismo por la montaña, Megève ofrece todo lo necesario para un buen descanso. Saborea un chocolate caliente en una de las cafeterías de la Place d'Eglise, sal de compras por el casco antiguo o disfruta de un paseo en carro de caballos. No te pierdas el Chalet du Mont d’Arbois, el primer chalet de lujo creado por la baronesa de Rothschild ni el famoso Hôtel du Mont-Blanc, donde se han alojado grandes personajes célebres como Alí Khan o Rita Hayworth.
A unos diez minutos a pie del Hôtel du Mont-Blanc se encuentra el Palais des Sports et des Congrès. Este centro deportivo contiene unas instalaciones excepcionales, como saunas, piscinas y una pista de patinaje de medidas olímpicas.
Para encontrar una buena oferta de viaje a Megève, busca vuelos al aeropuerto de Ginebra, en Suiza. O si lo prefieres, puedes llegar en tren hasta Sallanches, a unos 12 kilómetros de distancia, y desde ahí tomar un autobús hasta Megève. Para conducir en invierno es necesario utilizar cadenas o neumáticos de nieve, porque las condiciones climáticas pueden ser peligrosas.
Megève es un fantástico destino de vacaciones de invierno y de verano, con una agradable combinación de sofisticación y autenticidad saboyanas.