Seguramente, los manglares de AlThakira no sean lo que la mayoría de los visitantes tienen en mente cuando planean una visita a Catar. En este país en gran parte desértico, con una moderna capital llena de rascacielos, los mangles al norte de Doha ofrecen un contraste fascinante e inesperado. Puedes realizar este breve trayecto en coche para conocer mejor este tipo de árbol y explorar un ecosistema único.
Los mangles blancos o grises de Catar, conocidos como Avicennia marina, se han adaptado al ecosistema del país, marcado por el intenso calor desértico y el agua salada. De hecho, los árboles parecen desarrollarse incluso mejor en estas duras condiciones. Compruébalo tú mismo cuando navegues en kayak entre estos árboles de aproximadamente dos metros y medio de altura, cuyas hojas inferiores flotan sobre la superficie del agua durante la marea alta.
Visita el lugar durante la marea baja para ver las raíces aéreas que surgen de la tierra alrededor de cada árbol. Estas raíces pueden crecer de forma radial muy por encima de la parte superior de la frondosa copa de los mangles, con el fin de extraer oxígeno del aire para nutrir los árboles. Los manglares ayudan a limpiar el aire, filtran los metales de la tierra y del agua y protegen la costa.
Procura quedarte completamente quieto y observa la vida que bulle en el lodo alrededor de las raíces verticales. Tal vez haya pececillos atrapados en piscinas poco profundas, a la espera de que la marea les permita regresar al mar. También podrías ver cangrejos correteando por el cieno. Por la zona también pasean delicadamente flamencos, charranes, garzas y otras aves costeras, en busca de comida en las aguas poco profundas.
Puedes llegar en coche a AlThakira desde Doha en menos de una hora, o desde AlKhor en 10minutos. Te recomendamos que alquiles un kayak o que te unas a una visita guiada a remo para navegar hacia el norte por el estrecho canal, hasta la reserva de manglares de AlThakira. Otra opción es conducir unos 20minutos en torno a la ensenada para llegar a la reserva por tierra, aunque algunos tramos solo son aptos para todoterrenos.
Cuando visites los manglares, ten especial cuidado en las zonas donde veas que los árboles tienen raíces aéreas, ya que si caminas sobre estos órganos vegetales relativamente tiernos o si los golpeas con el remo, podrías dañarlos y acabar con la vida de unos árboles de gran valor ecológico.











