Aunque Ko Lanta no se puede describir como un destino fuera de los circuitos habituales, ciertamente puede presumir de largas extensiones de arena, tranquilas y apartadas. El turismo continuado de la isla garantiza una amplia oferta de opciones gastronómicas, ocio nocturno y actividades, desde el buceo hasta el yoga.
Dirígete a la costa este de Ko Lanta para explorar los pueblos pesqueros musulmanes, cuyos habitantes aún conservan su tradicional estilo de vida. Se recomienda visitar el pintoresco centro histórico de Lanta en marzo, cuando el vecindario cobra vida gracias a la comida tradicional y el entretenimiento del festival Laanta Lanta.
Aunque puede resultar tentador pasar los días tumbado bajo sol en una de las cuatro playas principales de Lanta, merece la pena dejar el mar para visitar el Parque Nacional de Mu Ko Lanta. Realiza excursiones por la exuberante jungla del parque, donde habitan monos, garcetas, serpientes y otras criaturas salvajes fascinantes. No te marches sin visitar el antiguo y romántico faro sobre el acantilado del cabo de Ta Noad, un bellísimo lugar con vistas a las dos playas del parque.
También merece la pena hacer una excursión hasta la cascada de Khlong Jak y disfrutar de un recorrido a través de la vegetación de la jungla y los rocosos acantilados. Refréscate en la poza natural de la base, donde cae el agua. Recorre en barco o kayak el manglar de Thung Yee Pheng, hogar del cangrejo violinista, la grulla y el águila pescadora.
Ko Lanta es uno de los principales destinos de Tailandia para practicar el yoga, donde se imparten clases completas y también se realizan sesiones más relajadas junto a la playa. Apúntate a una clase en una escuela de cocina de la isla y aprende a preparar el picante pad thai y el arroz glutinoso con mango dulce.
Muy cerca se encuentran las islas de Ko Rok y Ko Bida. Puedes llegar hasta ellas practicando el buceo de profundidad o superficie, o también en kayak. Las aguas de la costa de Ko Lanta también son perfectas para hacer surf y bodyboard, navegar y pescar.
El aeropuerto más cercano es el aeropuerto internacional de Krabi. Desde aquí puedes llegar a Ko Lanta en algo más de una hora combinando autobús y ferry. El turismo de Ko Lanta es muy estacional. De hecho, muchos negocios de la zona cierran durante la temporada de lluvias, de mayo a octubre. Busca con tiempo una oferta para viajar a la isla y conseguir los mejores precios.