En el Zoológico de Johannesburgo podrás acercarte a criaturas exóticas de todo el mundo. El recinto se extiende sobre una superficie de 55 hectáreas y acoge a cerca de 2.000 animales de más de 300 especies, que habitan en distintas áreas temáticas. Entre los favoritos se encuentran leones, leopardos, hipopótamos, cocodrilos y rinocerontes.
Encontrarás rutas bien señalizadas para que puedas moverte a tu aire por el complejo, o puedes ir de una zona a otra en monorraíl. En la sección del Amazonas, podrás ver especies autóctonas de la jungla como monos araña y pumas. En la Casa de los Simios encontrarás chimpancés, un gorila y un orangután de Sumatra. En el recinto de los guepardos te sobrecogerán los ejemplares de esta especie, pero también los perros salvajes africanos y los chacales etíopes. Atrévete a entrar en la Región de los Cocodrilos y observa cómo alimentan a estos temibles animales. Acude también al recinto de los leones y podrás acercarte a una espléndida manada que incluye el inusual león blanco.
En la zona de Madagascar conocerás a primates como el lémur rufo negro y blanco, una especie en peligro de extinción. Y no te pierdas el Templo de los Antiguos, donde descubrirás distintas especies de anfibios, arácnidos y reptiles. Si viajas con niños, llévalos a la granja para que puedan acercarse a ovejas, ponis y caballos. En el centro educativo, que abre los fines de semana, podrán tomarse una foto junto a animales disecados.
El zoológico está situado a diez minutos en coche del centro de Johannesburgo. Las instalaciones cuentan con una amplia zona de aparcamiento de pago. Quizá te apetezca hacer un pícnic en el entorno natural del recinto. Si lo prefieres, puedes comprar bebidas y comida en la cafetería de las instalaciones.
El Zoológico de Johannesburgo abre todos los días y, para acceder, es necesario pagar unos cargos de entrada muy asequibles. Se aplican descuentos a estudiantes, pensionistas y niños de entre tres y doce años. Por un cargo adicional, podrás disfrutar de los paquetes de visitas, que incluyen un recorrido por las zonas cerradas al público, una visita nocturna e incluso una acampada.
Aprovecha también para visitar el Museo Nacional de Historia Militar, situado en los terrenos del zoológico. Para acceder a esta atracción, deberás abonar unos cargos de entrada aparte.