No es un hotel propiamente dicho con sus servicios, sino un edificio rehabilitado con habitaciones o mini apartamentos turísticos, que tiene poco tiempo en funcionamiento y, por tanto, está en perfecto estado de mantenimiento. Mobiliario y decoración sencilla y funcional. La habitación tenía buen tamaño y el baño era muy espacioso Ventanal enorme que dajaba pasar mucha luz y el sol. La cocina era más bien testimonial. Si quieres algún utensilio tienes que pedirlo en la recepción. No aconsejo cocinar porque no tiene extractor. Si acaso, para preparar una ensalado o una sopa. La calle estaba en obras, pero para dormir no afectó. Dormimos muy bien. El desayuno era suficiente en cuanto a la variedad de los productos pero todo estaba bueno.