Essen se fundó en el siglo IX y creció como ciudad industrial dedicada a la producción del hierro gracias a la financiación de la familia Krupp. En poco tiempo se convirtió en uno de los centros industriales más importantes de Alemania, dedicado al sector del carbón y el acero, y siguió expandiéndose hasta mediados del siglo XX.
Podrás visitar el Complejo industrial de la mina de carbón de Zollverein, uno de los mejores ejemplos del legado industrial de la ciudad, conocido por ser una de las minas de carbón más bonitas del mundo, declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Hoy en día el edificio, de estilo Bauhaus, alberga instituciones culturales y artísticas que abarcan desde un museo hasta un centro de diseño. También puedes acercarte a la Villa Hügell, antiguo castillo familiar de los Krupp. Es una mansión de 269 habitaciones ocupada hoy en día por un museo de historia del arte y una sala de conciertos.
Por su parte, el Museo Folkwang es ideal para pasar un día entretenido, con exposiciones sobre toda la historia de la fotografía y una galería que reúne cuadros de períodos distintos. El Aalto Theater es la sala de ópera y ballet de la ciudad, de gran importancia desde el punto de vista arquitectónico.
Tampoco te puedes perder la catedral de Essen, una fantástica muestra del arte gótico, construida con arenisca. En su interior encontrarás preciosas obras como la “Goldene Madonna” de Essen, que tiene más de mil años de antigüedad y es la escultura de figura completa de la Virgen más antigua del norte de los Alpes.
Hay otro edificio religioso importante en la ciudad, construido en 1913: la Antigua Sinagoga. Antes de la guerra, era el principal lugar de reunión de la comunidad judía de Essen. Aún es uno de los mejores ejemplos de la cultura y arquitectura judías en Alemania anteriores a la década de 1930.
En el sur de la ciudad podrás explorar los barrios de Kettwig y Werden, que han conservado su carácter tradicional y local, con edificios de miles de años de antigüedad, como la abadía de Werden, dedicada a San Ludgero, que fue declarada basílica menor papal hace dos décadas.
Aunque es claramente una antigua ciudad industrial, Essen se ha rejuvenecido gracias a su viva cultura moderna, por lo que puede ser un fantástico destino para aprovechar cualquier oferta de viaje a Alemania.