Desde la ciudadela medieval, situada sobre acantilados de piedra caliza, el pintoresco pueblo de Dinant se arracima entre el cauce del río Mosa y las murallas de piedra que se elevan sobre él. Reserva uno de nuestros viajes baratos a Dinant y podrás contemplar un ejemplo fabuloso de arquitectura gótica, disfrutar de un crucero por el río, recorrer un castillo situado sobre un acantilado y probar la gastronomía regional.
Los elementos más impactantes de este pueblo son la catedral y la ciudadela. La catedral de Nuestra Señora de Dinant es un edificio de estilo gótico que data del siglo XIII. El campanario, en forma de pera, se agregó en el siglo XVI. Después de recorrer la majestuosa iglesia, puedes subir en el teleférico que conecta el templo con la ciudadela.
Esta gigantesca fortaleza medieval invita al visitante a perderse por sus salas y pasillos, y cuenta con una interesante exposición de armas. Después, quizá te apetezca disfrutar de las hermosas vistas del valle del Mosa y de Dinant desde la cafetería de la terraza.
De nuevo en el pueblo, visita la Casa de Adolph Sax, donde vivió el inventor del saxofón. Actualmente, la casa es un museo que permite descubrir el origen de este instrumento de viento madera. En el museo Maison de la Pataphonie puedes jugar con objetos cotidianos, como botellas y cubiertos convertidos en instrumentos musicales.
Al otro lado del río se encuentra el Museo del Patrimonio Medieval del Mosa, con una muestra de latón de Dinant, ya que este sector artesanal es muy importante en la zona desde tiempos medievales. Cerca de la estación de trenes de Dinant verás uno de los sitios más fascinantes del pueblo: la cueva de La Merveilleuse. Únete a una visita guiada por la cueva y podrás contemplar una gran cantidad de estalactitas y estalagmitas.
Los paquetes de vacaciones en Dinant también suponen un viaje gastronómico por las especialidades regionales, que podrás disfrutar en sus numerosas cafeterías. Dinant es famoso por el flamiche, un tipo de tarta de queso, así como por las galletas couque de Dinant, que tienen sabor a miel. Moja estos dulces en una bebida caliente antes de morderlos, pues su consistencia dura es legendaria.
Puedes llegar a Dinant en avión hasta Bruselas y recorrer después en coche o tren los 97 kilómetros que la separan de la capital en dirección sur. La mayoría de las principales atracciones del pueblo están a poca distancia andando. Si decides reservar uno de nuestros viajes a Dinant, embárcate en un crucero por el río y disfruta de otra perspectiva de la arquitectura, la historia y los hermosos paisajes que ofrece esta ciudad.