La Deutsches Eck, o "Esquina Alemana", es una de las zonas más bellas del país, y en ella convergen los ríos Rin y Mosela. En esta confluencia se encuentra Koblenz, una bella localidad que, recientemente, celebró sus 2.000 años de existencia.
Koblenz rebosa de historia. Julio César la conquistó en el año 1000 a.C., se convirtió en parte del Sacro Imperio Romano en el año 925 d.C. y sufrió intensos bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial. Pero es esta riqueza histórica la que ha dado forma al ambiente de la ciudad. En muchos sentidos, Koblenz es un collage de distintas épocas, algo que queda patente en la variedad arquitectónica de sus calles.
Sus viejos edificios y la complejidad de su historia quedan compensados por una oferta muy atractiva de cultura, gastronomía y vida nocturna. El casco viejo, o Altstadt, está repleto de callejuelas y pasajes. Esta zona linda con ambos ríos, así que reserva tiempo para sentarte en las terrazas de los cafés y disfrutar de la deliciosa gastronomía local y las bellas vistas de la ciudad. Koblenz se encuentra en el corazón vitivinícola de Alemania, y sus muchas bodegas harán las delicias de los aficionados al vino. Y, si te gusta ir de compras, disfrutarás de los alrededores de Löhrstraße, una zona de tiendas junto al casco viejo. Otro destino comercial popular es Löhr-Center, un centro comercial de tiendas exclusivas.
La situación privilegiada de Koblenz, próxima a dos ríos, permite realizar cruceros por sus aguas en los que probar los caldos locales y contemplar los castillos que salpican las riberas. Si no te apetece navegar, puedes alquilar una bicicleta y recorrer los senderos que discurren junto a los ríos. Visita también el castillo Stolzenfels, conectado con Koblenz por un ferri. Esta fortaleza del siglo XIII merece la pena por su arquitectura y por sus impresionantes obras de arte. Y, si quieres descubrir el lado más moderno del arte de Koblenz, no te pierdas el Museo Ludwig, con una amplia colección de piezas posmodernas.
Si encuentras una oferta de viajes a Koblenz en agosto, llegarás a tiempo para el Rhein in Flammen, un festival que dura un fin de semana y está lleno de conciertos y maravillosos espectáculos de fuegos artificiales. El Palacio Electoral esconde jardines de gran belleza, y en él se celebran festivales y conciertos durante todo el año.
Koblenz se encuentra a una hora de los aeropuertos de Fráncfort y Colonia. Está muy bien conectada por la red de ferrocarril, lo que convierte a esta vieja ciudad alemana en un destino muy accesible.