La arquitectura elegante característica del siglo XVII y la espectacular colección de arte colonial convierten a la catedral de Trujillo en uno de los monumentos que no te puedes perder. En tus viajes a Trujillo, contempla la catedral, que se alza dominante en el extremo norte de la Plaza de Armas, la plaza principal y el corazón del casco histórico de Trujillo.
Disfruta de las vistas que te regala el patio de la catedral hacia la elegante fachada de amarillo mostaza. Admira los campanarios abovedados, además del Cristo que se erige sobre la entrada principal.
Una vez dentro de la catedral podrás apreciar su colección de arte religioso y sus decoraciones ornamentales. Examina los lienzos coloniales que adornan los nichos arqueados de la catedral, entre los que podrás encontrar el Triunfo de la Eucaristía, que representa escenas del Cielo, la Tierra y el Infierno, además del Santo Toribio de Mogrovejo, en cuyo lienzo Santa Rosa de Lima recibe el sacramento de la confirmación.
Deléitate con el maravilloso retablo central de estilo barroco, una portentosa obra tallada en madera con columnas entrelazadas y esculturas de Cristo, además de otros santos. Disfruta del resto de retablos que contiene la iglesia, entre los que se incluyen el Cristo Crucificado de las Almas y San José de la Sagrada Familia. La catedral de Trujillo alberga igualmente una elegante colección de artículos de plata que incluye piezas que datan de principios del siglo XVIII.
Visita el museo que se encuentra en el interior de la catedral y contempla piezas talladas en madera y más cuadros del período colonial, entre los que se incluyen La Negación de San Pedro y un retrato de San Juan Bautista.
La catedral abre todos los días y la entrada es gratuita. No obstante, ten en cuenta que esta cierra sus puertas durante algunas horas a partir del mediodía. La iglesia es también un lugar de culto, por lo que se debe ir vestido de manera adecuada. Una vez hayas finalizado tu visita a los lugares de interés, aprovecha tu presencia en la Plaza de Armas para admirar la colorida arquitectura de estilo colonial que rodea esta arbolada plaza.
Durante la noche la catedral permanece iluminada con intensas luces blancas, lo que ensalza aún más la vista a este edificio, por lo que una visita a la plaza por la noche merecerá mucho la pena.