A diferencia de los castillos en los que habita la realeza, el Castillo de Vajdahunyad (Vajdahunyad vára) se adecuaría más a unos campesinos ya que este castillo alberga un museo agrícola. Al igual que otros grandes edificios de Budapest, la estructura se construyó para la exposición del milenio de Hungría de 1896. Observa la impresionante apariencia de estos edificios desde el lado opuesto del lago para comprender por qué se le llama castillo.También en su interior aguarda una gran belleza: una escalera de mármol, pilares esculpidos, lámparas de araña de cristal y vidrieras de colores. Allí se encuentra el museo agrícola más grande de Europa con exposiciones muy interesantes. La Historia de la agricultura húngara desde su origen hasta 1945 incluye información de las actividades agrícolas y de las herramientas desde el neolítico hasta la época actual, e incluye actividades interactivas para los niños. En otras exposiciones se explica el desarrollo de los animales domésticos, la caza, la pesca y la actividad forestal en Hungría, se muestran las aplicaciones comerciales y se representa a los trabajadores realizando sus labores.Aprende cómo se cultiva la uva y cómo se hace el vino en otra de estas exposiciones. Hasta finales del siglo XIX, el vino era la base económica para casi un tercio de la población del país. La exposición de los Valores Naturales y de la Conservación repasa los esfuerzos ecológicos de Hungría desde la creación de sus primeros terrenos protegidos en 1939 hasta el trabajo que se ha realizado para la conservación de un gran número de especies. En el Reino de las Plantas comprenderás la importancia histórica de las plantas y sus utilidades hasta la época actual.Además de las exposiciones agrícolas, puedes visitar las otras 40 colecciones del museo, que abarcan desde sellos hasta modelos de vehículos a escala, entre los que se incluyen un motor de vapor y una cosechadora mecánica. El Castillo de Vajdahunyad se encuentra en la isla Széchenyi en el Parque de la Ciudad (Városliget). En verano, puedes alquilar un bote de remos para navegar por el lago. En invierno, se conserva parte del lago como una pista de patinaje sobre hielo gigante. Alquila unos patines y haz piruetas sobre el hielo frente a este castillo de cuento de hadas. Date un respiro para disfrutar de un vaso de vino caliente o un aperitivo.Para llegar al castillo, toma el transporte público hasta la Plaza de los Héroes. Puedes llegar andando hasta el castillo en cinco o diez minutos.