El Ayuntamiento de Bremen forma parte de la ciudad desde el sigloXV y presume de ser su punto de interés más majestuoso, así como uno de los ejemplares más significativos de la arquitectura gótica europea. Pasea por la plaza del mercado y contempla la impresionante fachada del Ayuntamiento de Bremen, así como la estatua de Rolando que la acompaña. Si te entra el hambre, puedes acercarte al restaurante que se encuentra en la renovada bodega del edificio.
El Ayuntamiento de Bremen está compuesto por dos estructuras principales, el Ayuntamiento Viejo y el Ayuntamiento Nuevo. Observa la magnífica fachada del Ayuntamiento Viejo, que se agregó al edificio en el sigloXVII, decorada con relieves, gabletes y balaustres. Es tal su belleza y excelencia, que obtuvo la designación de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2004. Camina hacia la esquina noroeste, donde podrás admirar una excelente combinación de estilos gótico, renacentista, barroco y art nouveau.
Actualmente, el Ayuntamiento Nuevo contiene las oficinas del presidente del senado y el alcalde de la ciudad, mientras que el Ayuntamiento Viejo se utiliza para celebrar eventos ceremoniales y exposiciones.
Participa en alguna de las visitas guiadas que se ofrecen por el Ayuntamiento de Bremen y observa de cerca algunos de sus fascinantes elementos históricos. Cuando estés en el Ayuntamiento Viejo, visita el Salón Superior y el Salón Inferior, así como la magnífica Cámara Dorada, decorada al estilo art nouveau. Su opulenta decoración y el papel tapiz dorado se agregaron en 1905. El Ayuntamiento Nuevo contiene un impresionante salón que acoge la Sala del Senado.
Aprovecha para visitar el restaurante Bremer Ratskeller y disfrutar de una buena comida en la antigua bodega del Ayuntamiento Viejo. En esta bodega también se encuentra el barril de vino más antiguo de Alemania, pues data de 1653.
El Ayuntamiento de Bremen está ubicado en la plaza del mercado de la zona antigua de Bremen. Puedes llegar fácilmente en el tranvía público. Puedes contemplar su hermosa fachada desde fuera o participar en alguna de las visitas guiadas que se ofrecen por un módico precio. Eso sí: si quieres que la visita se ofrezca en inglés, es probable que tengas que reservarla con anticipación.